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Con el objetivo de tenerlo bajo los tres palos ante Quilmes el próximo lunes, el cuerpo médico de Central mandó a hacerle una máscara a Mauricio Caranta, quien sufrió una fractura de tabique.
El cuerpo médico de Rosario Central encargó una máscara a medida para que el arquero ataje el lunes a las 21.10 ante Quilmes en el cierre de la vigésima jornada del torneo local. El uno padece una fractura expuesta del tabique nasal que sufrió durante la igualdad frente a Sarmiento de Junín en la fecha pasada.
Según anticipó una fuente auriazul a Télam, «a Caranta le tomaron una copia de la cara y le mandaron a hacer una máscara especial a Buenos Aires, que van a traer este martes los dirigentes que viajaron a la reunión en (el Comité Ejecutivo de) la AFA».
Caranta sufrió la fractura expuesta del tabique nasal a los 28 minutos del primer tiempo del partido contra Sarmiento, cuando salió a despejar un córner y chocó con el brazo izquierdo de su compañero Damián Musto.
Tras el golpe, al arquero le acomodaron el hueso, le pararon la abundante hemorragia y siguió atajando el resto del encuentro.
En este sentido, el director técnico auriazul, Eduardo Coudet, advirtió que «van a jugar los que estén al cien por ciento de sus posibilidades y Manu (el arquero suplente Manuel García) cuando tuvo que estar lo hizo bien», motivo por el cual abrió al menos un signo de interrogación sobre la participación de Caranta contra Quilmes.
En cuanto al resto del equipo, el Chacho debe definir esta semana al reemplazante del suspendido Nery Domínguez, quien sumó su quinta amonestación. El jugador elegido sería el mediocampista José Luis Fernández, que integraría el doble cinco con Damián Musto.
Asimismo, el técnico deberá reemplazar a César Delgado, quien sufrió una distensión en el isquiotibial derecho, y en su lugar jugaría Franco Niell, que se recupera de una contractura en el isquiosural derecho.