El concejal Eduardo Toniolli salió en apoyo del Sindicato de Trabajadores Municipales de Rosario en el debate con la Fundación Apertura por la presunta diferencia entre salarios públicos y privados. El edil reivindicó “un Estado que sea evaluado en función de los derechos que garantiza, y no por criterios de «productividad»».
Toniolli consideró que evaluar «en base a criterios de ‘productividad (el trabajo de los empleados públicos) representa una terminología de peligrosa adaptación al ámbito de lo público”, y señaló que el informe realizado por la Fundación Apertura “cuenta con un sesgo fundamental –propio de la mirada de un lobby empresario – que surge de confundir el costo laboral con el sueldo bruto de los trabajadores, eso deriva en la sobrestimación del promedio salarial tanto de empleados públicos como privados”.
El concejal agregó que “si se hace el cálculo como corresponde, es decir sobre el salario neto de los trabajadores, y si además se pondera correctamente la jornada laboral de los empleados municipales – en tanto el informe de Apertura no cuenta las horas extras como trabajadas, pero si las usa en el cálculo de la masa salarial -, la diferencia entre el salario público y el privado es del 33 por ciento, muy lejos del 74 por ciento que sugiere el informe, y del 90 por ciento que instala este grupo de presión como gran título, con el sólo objetivo de generar una mirada distorsionada en la opinión pública, coincidiendo casualmente con la brutal ofensiva del Estado nacional y del poder económico concentrado contra los trabajadores públicos, que no es más que una forma de justificar el desguace estatal”.
“Pero además”, agregó el concejal del Frente Para la Victoria, “el estudio no considera a los estatales contratados, lo que bajaría en mucho el promedio salarial del sector, y por otro lado el mismo autor del informe, el contador Hernández, asume que el sueldo del empleado privado aparece subestimado, porque una parte de su ingreso (que estima en un 20 por ciento) se abona en negro para evitar las cargas sociales», y concluyó: «de tenerse en cuenta ambos factores, el cálculo de la brecha salarial entre los dos ámbitos se achicaría muchísimo más».
Toniolli señaló que “el documento de la Fundación Apertura señala – textualmente – que el presupuesto del Estado se divide entre, por un lado, la masa salarial de sus trabajadores, y por el otro los excedentes que le quedan ‘para atender las necesidades de la gente’, como si no hubiera relación alguna entre ambas”.
Por el contrario, el edil planteó una mirada “en la que la calidad del empleo público – y las condiciones en las que se desenvuelve – sí es importante, sobre todo porque creemos que un Estado debe evaluarse en función de los derechos que garantiza, de su presencia a la hora de regular y corregir desequilibrios de nuestra vida económica, y de los servicios que presta a nuestro pueblo, y no puede pensarse ninguna de esas políticas públicas sin los trabajadores estatales que le dan vida”.
