Un día después de que Donald Trump firme el decreto de creación del muro con México, el gobierno de Mauricio Macri dispuso incrementar los controles migratorios. Las similitudes son engañosas.
El plan yanqui, al menos en el discurso, apuntala el proteccionismo económico. El de Mauricio Macri sólo fortalece la xenofobia.
El gobierno de Macri avanzó varios casilleros en su plan de incrementar los controles migratorios. Este jueves creó por decreto la Comisión Nacional de Fronteras, la cual que tendrá como objetivo -según el alambicado discurso oficial- “establecer una estrategia integral de lucha contra el narcotráfico, la trata de personas, el contrabando y otros delitos transnacionales”.
Sin embargo, el nuevo orden fronterizo acumula una serie de elementos que lo constituyen en un peligroso dispositivo de control social. Según la agencia oficial de noticias Télam, “la nueva medida se suma a la puesta en marcha del sistema de Información Anticipada de Pasajeros (API) en aviones y cruceros, que busca restringir el ingreso al país de extranjeros con antecedentes penales y acelerar la salida de aquellos que sean condenados por delinquir”. Desde siempre las fuerzas de seguridad portuarias, aeronáuticas y aduaneras contaron con elementos para poder detectar personas con antecedentes penales o pedidos de captura internacional. Las nuevas órdenes, está más que claro, apuntan a controlar el flujo migratorio de pobres, no de viajeros que llegan en aviones o cruceros.
Marcos Peña, Patricia Bullrich, y Rogelio Frigerio tendrán un rol destacado en esta vuelta de tuerca a favor de un control de fronteras ejecutado por un Estado policial. La Comisión Nacional de Fronteras funcionará en el ámbito de la Jefatura de Gabinete, “a fin de armonizar su funcionamiento desde una perspectiva interministerial que aumente la integración fronteriza, facilite el tránsito de personas, agilice el comercio internacional y prevenga el delito transnacional”, según establece el Decreto 68/2017 publicado este jueves en el Boletín Oficial.
Cuando la administración Macri sostiene que el objetivo del organismo será actuar como «regulador y coordinador del funcionamiento de los pasos internacionales y centros de frontera”, sólo puede esperarse que gendarmes, prefectos y policías provinciales cometan abusos de autoridad frente a los migrantes más vulnerables, y se lleven adelante procedimientos irregulares que estarán muy lejos de cumplir la misión de combatir el delito organizado, que se planifica y organiza en otros ámbitos, muy alejados de las fronteras.
Entre las funciones de la nueva comisión se destacan “establecer las normas, sistemas y procedimientos técnicos requeridos para administrar, conservar y mantener los pasos internacionales y centros de frontera y controlar su cumplimiento”.
También se procura “coordinar las actividades de los organismos de control fronterizo en pasos internacionales y centros de frontera, procurando el eficiente desempeño y la integración de las funciones específicas que corresponden a cada uno de ellos en pos de un mejor control fronterizo”.
De acuerdo al decreto -que lleva las firmas del presidente Macri, el jefe de Gabinete Peña; y los ministros Bullrich, de Seguridad, y Frigerio de Interior-, la seguridad en los puntos fronterizos será responsabilidad de la Gendarmería Nacional y de la Prefectura Naval, mientras que el Departamento Interpol de la Policía Federal “coordinará” con la Dirección de Migraciones “la actualización sistemática y permanente de los registros de aptitud migratoria en lo referente a los pedidos de captura nacionales e internacionales”.
El decreto también dispone la creación de Centros de Frontera “que abarcarán los complejos fronterizos de control migratorio, aduanero, fitozoosanitarios y de servicios complementarios, ubicados en las inmediaciones de los respectivos pasos internacionales”.
Si ya desde hace un año proliferan los abusos de las fuerzas de seguridad en todo el territorio nacional, fogoneados por el discurso oficial, cabe esperar que de ahora en más también esos atropellos pasen a ser una costumbre cotidiana en los diferentes puntos aduaneros.
Los Centros de Frontera
En el marco de las nuevas disposiciones, se declaran Centros de Frontera a los pasos internacionales Concordia-Salto, que limita con Uruguay; los fronterizos con Brasil Paso de los Libres-Uruguayana, Santo Tomé-Sao Borja e Iguazú-Foz do Iguazú; Posadas-Encarnación, que limita con Paraguay; y los fronterizos con la República de Chile San Francisco, Pircas Negras, Agua Negra, Cristo Redentor, Pehuenche, Pino Hachado, Cardenal Samoré, Integración Austral y San Sebastián.
La nueva comisión estará integrada, con carácter “ad honorem”, por las siguientes autoridades, quienes podrán actuar por sí o a través de un representante: secretario de Fronteras del Ministerio de Seguridad, secretario de Relaciones Exteriores de la Cancillería, secretario de Obras Públicas y secretario de Interior del Ministerio del Interior, secretario de Gestión de Transporte del Ministerio de Transporte, director general de Aduanas y director nacional de Migraciones y titular del Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agropecuaria (Senasa).
También serán parte del flamante organismo migratorio el director nacional de Gendarmería Nacional, el prefecto nacional naval de la Prefectura Naval, el jefe de la Policía Federal y el director nacional del Registro, Fiscalización y Sanidad de Fronteras del Ministerio de Salud.
adhemarprincipiano
26/01/2017 en 14:25
el periodista tuvo oportunidad historia de enterarse porque EEUU. es lo que es?. el gran imperio de hoy. Entonces por favor no escriba «sandez» fuera de toda orbita politica mundial. Se le agradecera.