La diputada provincial Claudia Giaccone reclamó la declaración de la Emergencia Industrial en la provincia ante “una situación macroeconómica muy adversa”, y al respecto pidió una audiencia con el ministro de Producción y Trabajo de la Nación, Dante Sica.
En el marco de compleja situación por la que atraviesa la agroindustria en el sur santafesino, Giaccone reiteró el reclamo de la declaración de la emergencia Industrial, y adelantó la conformación en la zona de un foro en defensa del trabajo y la producción, ya que “hay varias empresas que le vienen pagando mal a sus trabajadores, y se amenaza en enero con suspensiones”, según relató.
“Hay una situación macroeconómica muy adversa”, remarcó la legisladora justicialista al insistir con el pedido de declaración de la ley de emergencia metalúrgica en Santa Fe, con el objetivo de “paliar la situación de los trabajadores”. Y agregó: “La semana pasada estuvimos repartiendo polenta y leche, lo que habla de la difícil situación que están atravesando muchas familias”.
Ante este contexto, Giaccone adelantó que solicitaron una audiencia con el ministro de Producción y Trabajo, Dante Sica, “para que nos explique cómo evitamos el cierre de nuestras empresas, que son históricas” en la región. “Es un año que termina con aumento de tarifas nacionales y provinciales, y no hay recuperación del salario sino pérdidas de puestos de trabajo. Un escenario muy difícil”, añadió.
“La región sur de Santa Fe tiene una devastación productiva y comercial enorme. Han caído los consumos estrepitosamente y no hace falta ver índices, sino sólo recorrer los centros comerciales de cada una de las localidades, y hablar con empresarios y comerciantes que nos dicen que no pueden acceder a créditos por la alta tasa de interés para poder subsistir y a su vez con obligaciones que tiene que cumplir con pagos de salarios y alquileres. Hemos tocado fondo”, lanzó.
Para Giaccone, la necesidad de declarar la emergencia en el sector industrial y agro industrial “no sólo es en el sur santafesino sino en el centro y norte de la provincia, donde también hay empresas que viene sufriendo”. Y afirmó que el principio de 2019 “demostrara una vez más que estamos en una emergencia muy profunda, y más allá de todo el esfuerzo que hagamos hay que exigir un cambio de modelo porque si no vamos al abismo”.
En un parte de prensa, la diputada repasó la crisis industrial que atraviesa en particular el departamento Caseros. La firma Gherardi, de Casilda –que se dedica a la producción de sembradores y herramientas manuales de ferretería– comenzó semanas atrás con su plan de reducción de trabajo a tres jornadas por semana, y abonará al personal un 75 por ciento de los días sin producción, además de otorgar a cada uno de sus empleados, como forma de compensación, dos días más de vacaciones correspondientes a 2018.
Según advirtieron desde la UOM Casilda, en conjunto con el resto de las localidades del departamento, el número de trabajadores en riesgo de perder su empleo se ubica por encima de los 500. En Firmat, San José de la Esquina, Arequito, Los Molinos, son algunas de las comunidades donde empresas locales denuncian caída de la producción.