Los abogados defensores del presunto narco Daniel «Tavi» Celis pidieron este martes que sea condenado a seis años de prisión y sólo por una de las dos causas del megajuicio en el que son juzgados 33 imputados, entre ellos el ex intendente de Paraná Sergio Varisco (Cambiemos). El fiscal federal había pedido que se condene a 10 años de prisión al ex jefe comunal, acusado de financiar el narcotráfico, y una pena de 15 para el sindicado vendedor de cocaína Celis.

Los letrados José Velázquez y Leopoldo Cappa aseguraron que Celis sufrió «prejuicio social» y pidieron «borrar la idea de que es narco», ya que -según afirmaron -comercializó cocaína por «necesidad» y sólo «por un tiempo determinado».

Al exponer sus alegatos de clausura ante los jueces Lilia Carnero, Noemí Berros y Roberto López Arango, del Tribunal Oral Criminal Federal (TOCF) de Paraná, los defensores además pidieron su absolución en la causa conocida como «narcoavioneta», donde se secuestraron 317 kilos de marihuana que estaban a bordo de este tipo de vehículo.

«No hay ningún hecho racional» que lo vincule a Celis con la causa», señaló la defensa, y remarcó que las acusaciones son «interpretaciones telefónicas» de dos charlas con otros imputados.

Se trata de conversaciones con otros dos imputados, Hernán Rivero, a cargo de la Unidad Municipal 2, a quien Celis le pide camiones municipales sin GPS para trasladar muebles y Ángel Silva, al que le consultó sobre combustible de alto octanaje.

Para la Fiscalía, los camiones eran para trasladar droga y el combustible para la avioneta, pero los abogados aseguran que era un pedido de muebles y para los kartings con los que el imputado corría.

Respecto a la causa «narcomunicipio», que investiga la presunta financiación del narcotráfico por parte de Varisco con dinero de la Intendencia, los abogados pidieron una rebaja de la pena y un cambio de carátula.

En sus alegatos, la fiscalía había pedido 15 años de prisión para Celis, sindicado como líder narco y uno de los jefes de la «organización criminal más importante» juzgada en Entre Ríos.

Para sus defensores, Celis es «un dirigente político», pero la campaña de Cambiemos en 2015 «lo dejó insolvente y eso lo llevó a cometer el robo en Diamante» por el que se encuentra actualmente preso.

«Nadie le financiaba la droga, la modalidad era a consignación», dijo la defensa, y afirmó que por eso el robo que sufrió de 15 kilos de cocaína lo dejó «en un estado de necesidad tan grande que vendía más cocaína» para poder pagarlos.

Finalmente, el letrado destacó que Celis «reconoció que militó, que aportó dinero y que siguió en el narcotráfico» y pidió «valorar» esa admisión.

La fiscalía

El fiscal José Candioti señaló en su acusación a Varisco como «coautor» de «financiamiento de actividades de comercio de estupefacientes» junto al ex concejal Pablo Hernández y la ex secretaria de Seguridad local, Griselda Bordeira, para quienes solicitó sendas condenas a 9 años de cárcel.

En su alegato ante el Tribunal Oral Federal en lo Criminal (TOFC) de Paraná, integrado por los jueces Lilia Carnero, Noemí Berros y Roberto López Arango, el fiscal requirió que «Tavi» Celis sea condenado a 15 años de prisión como «autor» de organizar y financiar la banda narco, y le fijen una multa de 300.000 pesos.

Para la fiscalía, Varisco realizó “un acuerdo en septiembre de 2017” con Celis en el que “se comprometió a entregar 50.000 pesos mensuales para financiar” la venta de drogas.

En su declaración, Celis admitió que vendía cocaína y confirmó que trabajó en dos campañas de Varisco a cambio de «favores».

Según relató, Varisco se comprometió a darle «40 contratos municipales y puestos en direcciones, subinspecciones o jefaturas y 200 programas sociales nacionales».

«Varisco también iba a aportar entre $30.000 y 50.000 mensuales», otorgarles «obras como construcción de jardines maternales y recambio de iluminación, y me iba a dar la dirección de la Unidad Municipal 2», que aglutina 37 vecinales, dijo el acusado, pero «no cumplió con su palabra».

Por su parte, Candiotti dijo que se trató de «una verdadera organización» dedicada a la comercialización de droga «a gran escala integrada por múltiples integrantes».

El fiscal detalló pruebas, escuchas, testimonios y elementos recabados durante toda la investigación que comenzó en 2017 con una llamada anónima a la Policía Federal alertando sobre un cargamento de marihuana.

Además, pidió ocho años de prisión y una multa de 15.000 pesos para los imputados Cristian Silva; Miguel Leguizamón; Sergio Baldi; Gaston De La Fuente y los hermanos Omar y Jose Ghibaudo.

En tanto que requirió la absolución de María Esther Márquez, curandera que ayudaba «espiritualmente» a los hermanos Ghibaudo, dueños del campo donde aterrizó una avioneta con 317 kilos de marihuana, y a Renzo Bertana, hijo «de corazón» de Celis.

Según la fiscalía, se está frente a la «organización criminal más importante» juzgada en Entre Ríos tenía como líderes a Varisco y a Celis que tenían un «acuerdo que excedía largamente lo político», y entre ellos oficiaban de comunicantes funcionarios municipales.

Por otra parte, el viernes pasado Varisco amplió su indagatoria ante el tribunal y afirmó que lo quieren «destruir políticamente».

El ex intendente de Paraná, quien actualmente permanece en libertad, recordó que durante la campaña en 2015 buscó recorrer «todos los rincones de la ciudad» y que fue en una de esas recorridas que conoció a «Tavi» Celis, sindicado narcotraficante y líder de la banda.

«Nunca dije que no lo conocía. Me fue presentado, pero mi relación es política», apuntó Varisco, tras lo cual negó tener vínculos «con la droga».

Además, Varisco negó «rotundamente haber hecho un acuerdo de financiamiento» con Celis, y destacó que es «agraviante, un desatino y un disparate», porque «no hay pruebas ni escuchas» que lo incriminen.

El ex jefe comunal acusó a «funcionarios policiales del Ministerio de Seguridad» por haber «hecho un informe sesgado y parcial».

Fuente: Télam

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