El auriazul cerró su participación en la Superliga con una derrota 2 a 1 ante Argentinos Juniors, en el Diego Armando Maradona. Comenzó arriba con gol de Ruben, pero Quintana y Vera lo dieron vuelta.
Rosario Central jugó en un reducto invicto en la Superliga, y el local se lo hizo saber. A pesar de ponerse en ventaja, el equipo de La Paternal puso las cosas en su lugar, y despidió al Canaya del torneo local con una derrota.
La apertura del marcador no necesitó de un claro dominador. Cuando corrían 14’ del primer tiempo, Marco Ruben apareció sin marca por detrás de toda la defensa en un córner, y sólo tuvo que mandar la pelota al fondo de la red, aprovechando que la trayectoria tuvo un desvío en la cabeza de Damián Martínez.
A partir de ahí, los dirigidos por Diego Cocca ganaron en confianza y comenzaron a dominar el encuentro. El lateral con pasado en Unión llegó a posición de ataque para rematar, lo que obligó a una estirada de Lucas Chávez.
Pero el gol que significó el empate para el Bicho, a los 32’, dejó mejor parado al dueño de casa hasta el final de esa primera parte. El grito fue del grandote Carlos Quintana luego de un centro al área que mandó Miguel Torrén.
Ahí nomás, Damián Batallini tuvo su chance y después Santiago Silva tuvo una más clara aún, de cabeza, que Rubén despejó en la línea. Los de Arroyito se quedaron sin su zona de confort y la pasaban mal.
Cuando el segundo tiempo no comenzaba a armarse, Fausto Vera aclaró todo a los 13’ con un gol producto de un rebote capturado a la salida de un córner, y de un desvío en Martínez que descolocó a Jeremías Ledesma.
La ventaja le facilitó todo al conjunto comandado por Diego Dabove, que empezó a manejar a su gusto la pelota. Cocca, que luego fue expulsado, intentó adelantar a los suyos con los ingreso de Lucas Gamba y Diego Zabala, pero no hubo caso.
Argentinos siempre estuvo más cerca del tercero que Central del empate. El ingresado Edward López le posibilitó a Ledesma sacar la pelota de la noche tras un cabezazo a muy corta distancia. Pero sin embargo, la defensa local durmió en el final, y Diego Novaretti, ya jugando en posición de ataque, no pudo conectar bien de cabeza, en la más clara de la visita.
Central volvió a dejar dudas como casi siempre que salió del Gigante de Arroyito. En esta ocasión se dio la lógica, porque cayó ante un equipo que supo pelear los primeros puestos y que fue invencible en su estadio durante toda la Superliga.
Colaborá con el sostenimiento de Redacción Rosario y El Eslabón por 300 pesos por mes y recibí nuestra info destacada todos los días y nuestro semanario todos los sábados en tu casa. Suscribite en este enlace: Redacción Rosario + El Eslabón.