El Canaya consiguió la clasificación a octavos de final tras el empate 1 a 1 ante el Inter, en Porto Alegre. Agustín Sández abrió la cuenta y Alan Patrick lo igualó. En la próxima instancia jugará con otro brasileño: Fortaleza.

Rosario Central se hizo fuerte en el estadio Beira-Rio de Porto Alegre, desde donde se trajo un empate y la clasificación a octavos de final de la Copa Sudamericana. Defendió el 1 a 0 conseguido en la ida en Arroyito la semana pasada, y eliminó a Inter, un peso pesado del certamen continental.

La apertura del marcador llegó a los 20’ del primer tiempo. Un centro al área que parecía diluirse terminó en los pies de Agustín Sández, que pateó entre varias piernas rivales y venció al arquero Sergio Rochet, de la selección de Uruguay. Todo lo que vino después fue aguantar el resultado y apostar a alguna contra.

El segundo tiempo arrancó torcido para el equipo que dirige Miguel Russo. Es que a los 4’ el dueño de casa llegó al empate a través de Alan Patrick. Antes, Jorge Broun había desviado un cabezazo del ecuatoriano Enner Valencia, pero nada pudo hacer en el rebote, que cayó en la cabeza del capitán de los rojos.

Central pudo imponerse ante un equipo plagado de figuras internacionales y con un presupuesto extremadamente superior al del club de Arroyito. Sacó la ventaja en Rosario y la defendió a capa y espada en Brasil, donde tendrá que volver para medirse ante Fortaleza en octavos.

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