Como en las elecciones primarias, en las generales todos se dieron por ganadores en Rosario. Pero, claro, siempre hay un solo triunfador que, en este caso, fue el mismo de siempre en los últimos años: el oficialista Frente Progresista cuya lista encabezó la socialista Clara García, que logró mantener un apoyo similar en las urnas al del 2 de agosto, lo que le permite extender su hegemonía en la ciudad.
Contra todos los pronósticos –que preveían una polarización entre el oficialismo y el peronismo– la UCR consiguió ampliar su margen de votos y obtener dos bancas y el PRO aportó la novedad al conseguir un escaño, por primera vez en su historia política en la ciudad.
El PJ conseguía renovar sus tres bancas en el peor escenario, o conseguir una cuarta, en el mejor, lo que lo llevaba a festejar aunque, en rigor, perdió un caudal importante de votos en los últimos dos meses: 70 mil, lo que no es poca cosa. Parte de esos sufragios drenaron hacia la UCR no frentista de Jorge Boasso, quien logró renovar su banca y la de Daniela León recogiendo una porción de sufragios mayor que en las primarias (de 40 mil saltó casi a 70 mil), mientras que el PRO, que encabezó Laura Weskamp, debutará por primera vez con un escaño en el Palacio Vasallo al reunir 40 mil votos contra los 5 mil de las primarias.
Alberto Cortés, de Proyecto Sur, aguardaba el recuento final para saber si conseguía volver al Concejo Municipal o si la banca número 11 sería la cuarta para el PJ. Así, y con el 99 por ciento de las mesas escrutadas, el Frente Progresista obtenía el 28 por ciento de los votos y mantenía su hegemonía en la ciudad que gobierna desde hace 14 años, sumando cuatro concejales.
Además de García ingresarán Gonzalo del Cerro (UCR frentista), Pablo Colono (PS) y Oscar Greppi (ARI). La lista del PJ encabezada por Héctor Cavallero se quedaba con el 24 por ciento de los sufragios lo cual lleva al Concejo, además de al ex intendente, al reutemista Diego Giuliano y a la kirchnerista Norma López, mientras que quedaba en las gateras el obeidista Osvaldo Miatello.
El PJ sufrió una pérdida enorme de votos entre las primarias del 2 de agosto y esye domingo, cuando obtenía 107 mil votos contra los 170 de hace dos meses. Eso hizo que crecieran las restantes fuerzas, aunque no el oficialismo que hizo idéntica elección a la de las
primarias, y que incluso pusiera en dudas la posibilidad de obtener cuatro bancas.
Una de las sorpresas la dio Boasso, quien casi consigue duplicar los votos de las primarias y se quedó con dos bancas, sumando a Daniela León. La otra, claro, fue Laura Weskamp, quien lideró la lista del PRO rosarino y consiguió 40 mil votos, suficientes para que la fuerza que a nivel nacional encabeza Mauricio Macri tenga un concejal en Rosario por primera vez.
El resultado de ayer de los comicios confirmó la imbatibilidad electoral del socialismo en Rosario –para tranquilidad del intendente Miguel Lifschitz que podrá disputar en mejores condiciones una posible candidatura a gobernador– y exhibió, a la vez, la posibilidad de que haya una representación más plural en el Concejo. Es que el oficialismo, aún ganando, ya no tendrá mayoría propia en el Palacio Vasallo.
(Fuente : El Ciudadano)