Los trabajadores del Instituto de Rehabilitación del Adolescente Rosario (IRAR) resolvieron realizar una medida de fuerza por tiempo indeterminado exigiendo la reincorporación de un compañero que fue despedido del establecimiento por el gobierno de la provincia. Las acusaciones expuestas por los funcionarios que motivaron el alejamiento del trabajador son consideradas «infundadas» por sus compañeros.
Los trabajadores del IRAR exigen «la inmediata reincorporación» del despedido, cuya relación laboral con el instituto era mediante un contrato. Además solicitan explicaciones a los funcionarios por el despido.
El despido fue calificado por los trabajadores de «persecución ideológica» y de «intento de disciplinamiento político, disfrazados de desobediencia a las reglas institucionales».
En un comunicado quienes llevarán a cabo la medida de fuerza consideraron «equivocada e imprudente la decisión de los funcionarios de apartar a una persona que se desempeñaba como acompañante juvenil, mientras que en la institución no se cumplen las actas firmadas por los funcionarios del área de instalar agua potable, implementar comité de higiene y seguridad, llamar a concurso a los profesionales contratados y hacer efectivo el pase a planta de los catorce acompañantes juveniles».
Los trabajadores que se encuentran nucleados en la Asociación de Trabajadores del Estado (ATE) afirman en el pronunciamiento que «el gobierno de la provincia incumple la promesa que realizó al comienzo de su gestión en 2007 de cerrar el dispositivo actual del IRAR, que somete a un régimen carcelario a los jóvenes alojados, incumpliendo las normas internacionales».
A su vez, denuncian «la continuidad de las condiciones de precarización laboral y la falta de políticas de promoción de derechos de los jóvenes alojados».
Los trabajadores convocaron a una concentración y una conferencia de prensa para esta miércoles a las 10 en la Plaza San martín ubicada en la esquina de Dorrego y Santa Fe.
