El mandatario uruguayo prefiere esperar y no seguir con polémicas.

El mandatario uruguayo confirmó su intención de no retomar las conversaciones por la pastera UPM  hasta después del 27 de octubre, pasadas las elecciones legislativas en Argentina, y cuando se recupere la presidenta. «Más vale conversar que mandar notas», dijo y agregó: «Yo voy a conversar siempre».

«Decidimos no hacer declaraciones, esperar un poco más. Queríamos ver que la señora presidenta se recuperara y le dieran el alta», anticipó José Pepe Mujica, en momentos en que la Argentina planea ir a los tribunales de La Haya para protestar contra la contaminación que la pastera UPM (ex Botnia) ejerce sobre el Río Uruguay.

«La Argentina está en un proceso electoral, me parece que es prudente esperar que pase», señaló.

Mujica minimizó la importancia de las notas diplomáticas que recibió desde la Cancillería argentina e insistió: «Primero más vale conversar que mandar notas. Después vemos. Pero yo voy a conversar siempre».

Luego de que Uruguay permitiera que la ex Botnia aumentara su producción, el gobierno argentino salió a denunciar que la pastera contamina el Río Uruguay y amenazó con ir a los tribunales internacionales para intentar frenar el proceso.

En medio de denuncias cruzadas, la discusión se vio tensada la semana pasada, cuando el propio Mujica respondió en duros términos a la nota diplomática que había enviado el canciller argentino Héctor Timerman. El único que da un últimatum es Dios, advirtió en esa ocasión.

En tanto, el senador nacional por el FPV de Entre Ríos, Pedro Guastavino, dijo que la decisión del presidente uruguayo José Mujica de autorizar el aumento de la producción de la pastera UPM (ex Botnia), fue “una nueva violación al tratado del río Uruguay”.

“Me sorprendió la actuación del presidente Mujica. Tomó una decisión unilateral que no esperábamos al autorizar el aumento de la producción de la planta” ubicada a orillas río Uruguay, resaltó Guastavino.

El senador nacional, oriundo de Gualeguaychú, fue vicegobernador de Entre Ríos durante el inicio del conflicto por la instalación de la pastera finlandesa y de la española ENCE, luego mudada más al sur sobre la localidad uruguaya de Conchillas gracias al esfuerzo diplomático de la Argentina.

Guastavino sentenció que el aumento de la producción de UPM “es una nueva violación del tratado del río Uruguay y de los acuerdos firmados en Anchorena (Uruguay) y en Olivos para el cumplimiento del mandato del Tribunal de La Haya”.

No obstante, el legislador nacional, quien busca la reelección como senador por el kirchnerismo entrerriano acompañado por Sigrid Elisabeth Kunath, consideró que la discusión diplomática con Uruguay “no afectará el resultado de las elecciones en Entre Ríos”.

 

Fuente: El País de Montevideo/ Infobae/ Télam

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