Rosario Central cayó 3 a 2 ante Vélez en el Gigante y no pudo extender la racha sin derrotas. El juvenil Ramiro Cáseres anotó los tres tantos para el Fortín; Acuña y Castillejos descontaron sobre el final.
Central recibió un duro cachetazo en su propia casa, y no supo aprovecharse del flojo presente por el que atraviesa su rival, que semanas atrás fue eliminado de la Copa Sudamericana.
Pero el desarrollo del partido le fue adverso, porque los pocos momentos en los que tuvo el control de la pelota en la primera etapa, las ideas brillaban por su ausencia cada vez que se aproximaba al arco defendido por Sebastián Sosa.
A los 11’ de ese primer tiempo, Federico Insúa dejó cara a cara a Ramiro Cáseres, quién ensayó una gran definición ante Caranta para poner arriba al Fortín. El juvenil comenzaba a anticipar la magnífica tarde que iba a tener.
Vélez contó con varias posibilidades más de aumentar el marcador antes del descanso, pero el uno Canaya tenía una tarde inspirada, que se iba a acabar en el complemento.
Al minuto de juego Central duerme en la salida y nuevamente Cáseres definía en soledad y estiraba la ventaja para la visita. A partir de ahí, los espacios aumentaron para los de Liniers, que iban a conseguir liquidar el partido con otro tanto del juvenil a los 8’.
Los de Miguel Russo se metieron tarde en el partido pero a pesar de la gran diferencia, logró descontar primero con Walter Acuña (41’) y luego con Gonzalo Castillejos (44’), ambos ingresantes desde el banco.
En esos minutos finales creció el rendimiento de Federico Carrizo y de los que entraron en el segundo tiempo, pero prácticamente no hubo tiempo para buscar el empate.
Central dejó pasar la oportunidad de estirar la racha en la que acumulaba cuatro triunfos y cuatro igualdades, mostró viejos vicios de su peor período en el campeonato, pero logró revertir la imagen en el segundo tiempo que lo dejó en las puertas de la hazaña.
