Tal como lo habían anunciado, los legisladores de todo el arco opositor se retiraron minutos antes de comenzar el debate sobre el proyecto de la nueva Ley de Inteligencia en el plenario de comisiones. El secretario de Inteligencia, Oscar Parrilli, los acusó de tener «una actitud intolerante».
Los bloques opositores en el Senado resolvieron no participar del debate sobre la nueva ley de inteligencia propuesta por el gobierno nacional, y que comenzó en la tarde de este martes con un plenario de comisiones de Asuntos Constitucionales y Justicia y Asuntos Penales convocado por el oficialismo.
En una reunión de la que participaron los jefes de bloque de los partidos de la oposición, Gerardo Morales (UCR), Gabriela Michetti (PRO), Adolfo Rodríguez Saá (Peronismo Federal) y Rubén Giustiniani (Socialismo), se decidió no asistir y la resolución fue anunciada por fuentes del bloque de PRO, que precisaron que los jefes opositores ofrecerán una conferencia de prensa en el Senado para dar a conocer una agenda propia respecto a la reforma del sistema de inteligencia.
En la apertura del plenario de comisiones del Senado, Parrilli lamentó que «hay sillas vacías» en el salón Azul en alusión a la oposición que decidió no presentarse, y consideró que a las «instituciones se las defiende debatiendo» y calificó la postura como “una actitud intolerante”.
Al encuentro asisten el secretario Legal y Técnico de la Presidencia, Carlos Zannini, el director de la Secretaría de Inteligencia, Oscar Parrilli, y el subdirector de ese organismo, Juan Carlos Mena.
En tanto, el presidente de la comisión de Asuntos Constitucionales de la Cámara alta, Marcelo Fuentes, quien preside la audiencia, informó que la discusión continuará el miércoles cuando fueron citados miembros del Centro de Estudios Legales y Sociales (CELS) y expertos invitados por la oposición. El objetivo del oficialismo es emitir dictamen ese mismo miércoles para llevar la discusión al recinto el próximo 11 de febrero y luego girarlo a la Cámara de Diputados.
Fuentes salió al cruce de las críticas de la oposición, al calificarlas de «inconducentes», y rechazó el reclamo de que el sistema de escuchas telefónicas pedidas por la justicia pase a manos de la Corte Suprema de Justicia en lugar de a la Procuración General de la Nación como sostiene el proyecto.
El senador consideró que a la oposición «el árbol le tapa el bosque» por el «encono» que sienten hacia la Procuradora General de la Nación, Alejandra Gils Carbó, y «no se dan cuenta -acotó- que ese organismo es un segmento extrapoder, de imparcialidad, que da garantías y que independiza para dar esa imparcialidad».
Fuente: Infonews.
