El Frente de Mujeres Evita repudió este lunes las agresiones sufridas por la dirigente trans Michelle Mendoza y otros dos jóvenes, por parte de la policía. “No podemos más que indignarnos”, sostuvieron. Desde la delegación local de la CTA exigieron “el desplazamiento del personal implicado”.
“Expresamos nuestro más enérgico repudio a las agresiones sufridas por la compañera Michelle Mendoza y otros dos jóvenes, de parte de las fuerzas policiales de la provincia. En ese sentido acompañamos a nuestra organización, el Movimiento Evita, en la denuncia por violencia institucional que se presentará luego de lo ocurrido”, señala el comunicado de prensa del Frente de Mujeres Evita.
En este sentido, expresaron que ante este acontecimiento “no podemos más que indignarnos como mujeres comprometidas en la lucha contra todo tipo de represión y discriminación, y en favor de los derechos de todas las minorías históricamente oprimidas”.
El escrito recuerda que “este sábado a la madrugada nuestra compañera del Frente de Diversidad del Evita fue ferozmente golpeada por un comando radioeléctrico cuando se encontraba en un automóvil junto a dos amigos en avenida Francia al 5300”, y que luego fue “trasladada a la seccional 18 donde continuaron los golpes y le sustrajeron el celular y dinero”.
“Se trata de un hecho de abuso policial hacia una militante por los derechos del colectivo LGBT, que lejos de callar su voz, apuesta a la lucha cotidiana contra las opresiones que ejercen, entre otros, las fuerzas de seguridad. Es por eso que denunciaremos este accionar represivo, y llamamos a la comunidad toda a repudiar este hecho para construir una sociedad basada en una mayor igualdad y equidad. El compromiso debe ser de todos”, concluye.
Por su parte, desde la Central de Trabajadores de la Argentina Autónoma Regional Rosario y Provincia de Santa Fe, manifestaron su “repudio a las agresiones sufridas por la titular del Frente de la Diversidad Sexual del Movimiento Evita y ejecutadas por el personal policial de la Comisaría 18°”.
En ese escrito reclaman “el desplazamiento del personal implicado”, además de manifestar “la más absoluta solidaridad con esta compañera cuyo caso refleja las vivencias de muchas y muchos”.
La CTA recuerda que “no es la primera vez que la referente trans es blanco de agresiones por parte del personal de dicha seccional”, ya que “había recibido y denunciado públicamente amenazas y persecuciones policiales en su contra en 2012, apuntando como autores a policías de la 18°”.
“La violencia policial, con anuencia política y complicidad judicial, son los garantes de la impunidad en nuestra provincia. Esta Central no permitirá que haya una nueva Sandra Cabrera y exige el desplazamiento inmediato del personal implicado, una profunda investigación sobre los hechos y la condena correspondiente a los responsables”, cierra el comunicado.
