Foto: Prensa Rosario Central.
Foto: Prensa Rosario Central.

Central había comenzado en desventaja ante Estudiantes, pero logró revertir el resultado y ganó 2 a 1 en San Juan por los cuartos de final de la Copa Argentina. En la siguiente instancia se las verá con Racing.

Tal como se esperaba, el duelo frente al Pincha se le presentó complejo a un Central que no quiere bajarse de ninguno de los dos frentes que aún mantiene. Los goles de José Luis Fernández y Marco Ruben, ambos en el segundo tiempo, le permitieron dar vuelta el marcador que se le había presentado desfavorable con el tanto de Israel Damonte en el inicio del encuentro.

La primera etapa no contó con grandes emociones. Al cotejo le costó armarse y ninguno de los equipos podía desplegar su juego. El trámite no tuvo un claro dominador, los arqueros prácticamente no tuvieron actividad, y Ruben sufrió la falta de un acompañante en el ataque.

El gol de Damonte a los 9’ pegó duro en el auriazul, que atravesaba un mal momento en ese tramo del partido. El volante aprovechó la estática posición de Manuel García en un córner, lo anticipó de cabeza y aventajó a los pincharratas.

Minutos más tarde, el conjunto dirigido por Eduardo Coudet tuvo su única aproximación antes del descanso. Jonás Aguirre recibió una gran habilitación de Giovani Lo Celso, y con poco ángulo no pudo evitar la resistencia de Hilario Navarro.

En el complemento, la obligación por alcanzar la igualdad adelantó unos metros en el campo de juego a Rosario Central, mientras que Estudiantes quedó resignado a un contraataque. De todas maneras, las jugadas claras seguían sin aparecer.

El juvenil Lo Celso le pegó desde el borde de la medialuna y su remate pasó muy cerca. Después, una mano de Álvaro Pereira en el área debió haber sido penal, pero el árbitro Jorge Baliño ignoró la jugada.

La tranquilidad para el Canaya llegó a los 24’, cuando José Luis Fernández (que había reemplazado a Damián Musto), con la complicidad de Navarro, anotó el empate en una jugada que pedía centro.

A esa altura, el goleador del torneo local ya tenía de socio a Marcelo Larrondo (ingresó por Aguirre), en una clara demostración de que el Chacho quería evitar los penales. Y lograría su cometido gracias al gol de Ruben a los 30’. El capitán se estiró en un gran esfuerzo para alcanzar con la punta del pie el pase de Lo Celso, y sólo debió empujarla a la red.

De ahí en más, Central no sufrió sofocones y la clasificación a semifinales no corrió peligro. En esa llave se medirá con Racing. Todavía con vida en el torneo local, el equipo de Arroyito no resigna la Copa Argentina y promete dar pelea hasta el final.

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