«Quiero decirles a todos los que escucharon que los derechos humanos son un curro, que el único curro fue el que hicieron durante la dictadura los grupos empresarios«, dijo la presidenta Cristina Kirchner, al inaugurar la segunda etapa del Polo Científico de Palermo. Como dicen en el barrio quien quiere oír que oiga y que se pongan los sayos que quepan. En su discurso, habló de la oposición, de Cambiemos y pidió repasar los pasos cualitativos que se dieron en los últimos doce años.
Acompañada por el candidato del Frente para la Victoria, Daniel Scioli, Cristina dijo que el 22 de noviembre, habrá “balotaje en un país normal, ordenado social y económicamente” y que consideró los ejes de su gestión. En contraposición, criticó a quines “hablan de asegurar la gobernabilidad creyendo que se trata de un acuerdo de cúpulas dirigentes”. Para la mandataria, la gobernabilidad se da por añadidura de la equidad y la igualdad de oportunidades.
En medio de muestras de afecto, la Presidenta no pasó por alto el tenor que en los últimos días le dio la oposición a la campaña que encabeza Scioli, haciéndola responsable de generar temor y de embarrar la cancha.
“Campaña cloaca es la que sufrió esta Presidenta y sufre todos los días», arrancó. Y dijo que el accionar del Frentre para la Victoria, “es lo más limpia y transparente que se vio, porque lo único que hacemos es recordar lo que (los candidatos de la oposición) hicieron y dijeron», enfatizó, aplicando el factor memoria a la acusación.
Ya de lleno en la campaña, la Presidenta dijo que “las críticas a un gobierno deben ser aceptadas, deben ser discutidas, pero a mi me publicaron más de treinta tapas que no tienen que ver con mi gestión sino por mi condición de mujer. Una diputada dijo que no iba a gobernar más después de mi operación, que iba a ser un vegetal”, evocó sin anestesia.
Dirigiéndose a cada ciudadano, la Presidenta pidió hacerse responsable de su voto, porque no se elige entre San Martín y Belgrano. «Hay que elegir entre dos modelos de país, con falencias, errores y cosas por mejorar. Pero, por favor, después no vengan con el que se vayan todos, porque va a ser demasiado tarde y nos habrán hecho pomada”, graficó.
Parada casi en la bisagra del cambio de mandato, Cristina pidió volver la mirada sobre el contexto social, político y económico, en el aquí y ahora del país. «No recuerdo ningún cambio de gobierno con este panorama tan positivo», dijo.
Sin transmisión nacional, se refirió a lo que los medios hegemónicos instalaron con fuerza, al punto que lograron convertir en una de las insólitas banderas de la oposición. “Se quejan de las cadenas nacionales y ocultan lo que se construye todos los días”, comentó para resaltar que ella escucha a los saben, por lo tanto no es verdad “que no escucho a nadie”.
En la misma dirección, recogió las críticas hacia su frontalidad, «no importa si me quieren o no me quieren. Lo que quiero es que cada argentino crezca un poco más. Eso es lo que aspiro», remarcó y dijo que «no es un problema de buenos y malos, es un problema de comprensión», señaló.
La Presidenta, destacó también el «salto formidable» que se dio en los últimos años en materia de ciencia y tecnología, y remarcó que «es la primera vez en la historia que se realiza una inversión de infraestructura tan grande y se le da la casa definitiva a los investigadores y científicos del Conicet».
En este marco anunció el Proyecto de Ley de Incorporación del personal de la carrera de apoyo a la investigación y desarrollo del Conicet, al régimen previsional de investigadores científicos y firmó un convenio entre los ministerios de Ciencia y Agricultura, para el financiamiento de iniciativas de estudios regulatorios para productos agrobiotecnológicos.
De la inauguración de la segunda etapa del Polo Tecnológico, ubicado en el predio d elas ex bodegas Giol, también participó el ministro de Economía, Axel Kicillof y el titular de Ciencia y Tecnología, Lino Barañao.
