Espacios culturales autogestivos de Rosario denunciaron que el municipio quitó de la agenda oficial los eventos organizados por particulares y volvieron a exigir el tratamiento del proyecto de la ordenanza » Club Social y Cultural».
Espacios Culturales de Rosario (Ecur) volvió a la carga contra la Municipalidad luego de constatar que la agenda pública , sólo contiene las actividades organizadas por la Secretaria de Cultura.
“El Estado Municipal decidió sacar de la agenda cultural toda difusión que no sea oficial, por ende los espacios culturales no tenemos más esa vía para difundir y fomentar las actividades que se realizan en nuestros espacios autogestivos”, denunció el Ecur, a través de las redes sociales.
En el marco de la discusión por la modificación de la norma que regula el funcionamiento de bares en la ciudad, el anterior secretario de Cultura, Horacio Ríos se había comprometido con estos espacios que más allá del interés lucrativo ofrecen una rica oferta de actividades culturales, en incluir en la nómina oficial la programación de estos espacios.
En este sentido, y al advertir que ya no formaban parte de la grilla, los espacios nucleados en Ecur denunciaron “otro revés para la ciudad. Gracias secretario de Cultura Guillermo Ríos, además de no acompañar la ordenanza nos das la espalda”, reprocharon.
En 2014 con el cierre de bares culturales por parte del municipio, el Distrito 7, espacio gestionado por el partido Ciudad Futura, impulsó una ronda de reuniones con artistas, concejales y funcionarios para generar cambios en la normativa que rige los espectáculos públicos, ya que la misma no contempla la actividad de estos espacios emergentes en la ciudad.
De este modo, en 2015 las bancas de Fernanda Gigliani y María Eugenia Schmuck presentaron en el Concejo Municipal el proyecto de Club Social y Cultural, elaborado por los espacios que integran el Ecur. Aun con Sin embargo, hasta el momento el proyecto aún no obtuvo tratamiento sobre tablas.
¿Qué es el Club Social y Cultural?
El Club Social y Cultural refiere a los espacios que más allá de sus características, trabajan producciones musicales, teatrales, muestras, presentaciones, talleres y seminarios entre otros formatos de expresión que tienen en común no estar ligados al interés lucrativo.
Según expresaron sus hacedores, el Club excede el circuito comercial, no sólo por la motivación de las actividades, sino por el “trato y las formas de trabajo que se ofrecen a quienes participan del espacio ya sean músicos, productores, talleristas y artistas en general”.
