En Rosario la primera huelga general de la CGT y las CTA contra el gobierno de Macri tuvo alto acatamiento. Marchas, actos y piquetes multitudinarios llevaron este jueves a los referentes gremiales a rebautizar a la ciudad como “la capital nacional del paro”.
Si bien desde temprano diversos accesos a la ciudad y varios puntos dentro del ejido urbano amanecieron con piquetes, en su mayoría encabezados por la Corriente Clasista y Combativa (CCC), el nucleo de la protesta estuvo en el microcentro.
Alrededor de las 10 las nutridas columnas del Movimiento Sindical Rosarino y la CTA de los Trabajadores ‒aunque también se sumaron otros gremios de la ciudad y la región– partieron desde la plaza Sarmiento (Entre Ríos y San Luís) hacia la intersección de las peatonales Córdoba y San Martín.
En esa emblemática esquina, miles de trabajadores y trabajadoras rodearon el escenario sobre el que se escuchó la palabra de numerosos dirigentes sindicales, entre ellos Paulo Junco (Amsafé), Martín Lucero (Sadop), Edgardo Carmona (Sindicato de Prensa Rosario), Alberto Botto (Luz y Fuerza), Sonia Alesso (Ctera) y Matías Layús, quien tuvo a cargo el cierre del acto.
Los oradores se mostraron satisfechos por la contundencia del paro y la masividad de la movilización y coincidieron en destacar “la unidad en la calle” que están forjando los sindicatos, y en remarcar que esta huelga general es sólo el comienzo “hasta frenar la política económica del gobierno nacional”.
«No tomen a la gente por tonta. Este acto se llena, las plazas se llenan, los paros se cumplen porque hay pobreza, porque hay despidos, porque la gente está cansada”, apuntó el titular del Sadop Rosario, Martín Lucero, una de las voces que se escuchó en el acto. “Dejen de gobernar con encuestas, dejen de gobernar para los medios, empiecen a gobernar para la gente”, reclamó el dirigente sindical.
El secretario general del Sindicato de Prensa de Rosario, Edgardo Carmona, también fustigó a la Casa Rosada, y señaló que «cada rama de la industria, de la pequeña y mediana, que da trabajo a un 70 por ciento de los argentinos, en 2016 decreció, cerró establecimientos, expulsó trabajadores a la calle». «En Rosario cerraron unos 500 negocios en los últimos tiempos, bajaron las ventas, hay un millón y medio más de pobres en Argentina», añadió el dirigente para subrayar sus críticas a Macri.
Alberto Botto, secretario general de Luz y Fuerza, gremio que se destacó por aportar una de las columnas más nutridas de la movilización, advirtió en su discurso que el paro de este jueves “es un llamado de atención al gobierno”.
“No vamos a abandonar la calle”, afirmó el referente sindical, quien luego acusó al gobierno de estar llevando a los trabajadores y al pueblo a la misma situación que en 2001.
A su turno, la secretaria general de Amsafé provincial y de la Ctera, Sonia Alesso, coincidió con Lucero en destacar que Rosario se convirtió en la “capital nacional del paro” y al igual que todos los oradores, fustigó con fuerza al gobierno nacional y su política económica.
“No vamos a permitir que el ajuste pase”, aseguró Alesso, y luego contó: “Hoy veíamos como la Gendarmería intentaba frenar los piquetes. Hoy, quien se paseaba por los piquetes es el segundo de Patricia Bullrich y se llama Eugenio Burzaco. ¿Y saben quién es? Es el que armó la policía de Neuquén, el que armó el operativo que terminó con la muerte del maestro Carlos Fuentealba”.
Mientras se desarrolló la marcha y el acto, delegaciones de los trabajadores mercantiles recorrieron el centro de la ciudad, viendo el acatamiento en los comercios, después de haber estado en algunas sucursales de grandes supermercados y en Falabella desde la mañana temprano.
Por su parte, la CTA Autónoma hizo una concentración en Corrientes y Córdoba.
También a la mañana temprano, se registraron gran cantidad de camiones estacionados en la zona de la salida de la autopista a Santa Fe, donde había militantes de Camioneros, con una bandera de la rama Aguas Gaseosas.
En uno de los cortes, el de Circunvalación y Juan José Paso, una persona en moto embistió a los manifestantes lastimando a una mujer, que resultó quebrada en una pierna. Producto de ese choque, también un niño fue lastimado.
