Canayas y leprosos se verán las caras en cuartos de Copa Argentina. A duras penas, Central venció al conjunto de la B Nacional por penales (fue 5 a 4, tras el 1 a 1 en tiempo reglamentario) y 2018 tendrá el derby de la ciudad.
Por esas cosas raras del fútbol argentino -ayudado por la desorganización de la Superliga- Rosario Central y Newell’s no se iban a cruzar durante todo el año. Sin embargo, el buen andar de ambos en el certamen federal hará posible el clásico más apasionante del país.
Los 90’ dejaron poco y nada, sobre todo para el equipo dirigido por Edgardo Bauza, que pasó de jugar mal, a jugar peor. Los resultados ya no acompañan, ya no disimulan el mal funcionamiento y le pasan factura de lo que se ve en el campo de juego. En este caso, lo salvaron los penales, y la destacada actuación de Jeremías Ledesma, que tapó dos de los seis que le patearon en la serie.
El 1 a 1 en el partido fue producto de los goles de Germán Herrera a los 32’ del primer tiempo, y de Leonardo Acosta a los 36’ de esa misma etapa, desde los doce pasos. El líder de la B estuvo más cerca de ganarlo, pero Joaquín Susvielles se perdió la victoria de una manera increíble, con el arquero auriazul ya en el piso.
Ya en la serie de penales, los del Patón fueron más efectivos que sus rivales. Sólo Fernando Zampedri falló el suyo. El resto (Néstor Ortigoza, Marco Ruben, Alfonso Parot, Washington Camacho y Matías Caruzzo) fue infalible. Ledesma le contuvo los disparos a Mauro González y Nahuel Basualdo, y le dio la clasificación a la siguiente instancia.
El análisis de este partido, en los medios de comunicación y en la calle, no pasará de unos minutos, porque lo que se les viene por la Copa es enfrentar al rival de toda la vida. Día, horario, sede, árbitro, público sí o público no, son preguntas aún sin respuestas.