El concejal Eduardo Toniolli presentó este miércoles el informe del Observatorio Social Transporte, en el que revela un “incumplimiento del nuevo pliego, favoreciendo a empresas privadas”. Además, cuestiona la grilla de horarios de verano.
El edil justicialista presentó este miércoles por la mañana, en el bar La Muestra (San Luis 601) un nuevo informe del OST que, a unos días del inicio del nuevo sistema de transporte urbano de pasajeros, detalla “entre otras irregularidades, la adjudicación de recorridos a las empresas privadas por parte del Municipio, por fuera de lo establecido en el nuevo pliego”.
El relevamiento también expone un análisis comparativo de la grilla de verano 2019 con la del año pasado, que “evidencia una reducción considerable de las unidades en servicio para este año, particularmente en las líneas que gestionan Rosario Bus y El Cacique, impactando negativamente en las frencuencias”, según afirmó Toniolli.
“La adjudicación de recorridos incumple lo establecido en el nuevo pliego, favoreciendo a las empresas privadas con las líneas más rentables. El ‘período de transición’ que esgrimen los funcionarios municipales para justificar esta decisión, no se ajusta a la norma”, afirmó el referente del Movimiento Evita, y agregó: “El pliego es claro: 120 días después de adjudicadas (en este caso la adjudicación se produjo a fines de agosto) las líneas debían circular tal como fueron licitadas”.
Por otra parte, el legislador local se quejó por las frecuencias de los colectivos, al remarcar que “la grilla de horarios de verano confeccionada por el Municipio evidencia una reducción importante de colectivos en la calle en comparación con el verano 2018, en particular en las líneas que gestionan Rosario Bus y El Cacique”.
“Si bien la reducción de servicios afecta a la mayoría de las líneas, algunas se han visto particularmente resentidas como la 102 Roja, 106 Roja y 125 (Rosario Bus), y el 125 y 122 Roja (El Cacique), con un 20 por ciento menos de colectivos en la calle en comparación con el verano pasado”, ejemplificó.
Por último, Toniolli señaló que “los aumentos sistemáticos del boleto, sumado a la pérdida del poder adquisitivo de la población, impactan en una baja en la cantidad de usuarios del sistema: en 2018 se vendieron menos viajes que en 2001 y 2002”.
