Este jueves, a partir de las 9.30 en el Complejo Cultural Atlas (Mitre 645), se lanzará la campaña “Una casa para Kilian”, el nene de 6 años que necesita vivir con las condiciones de salubridad óptimas. “Kilian es un ejemplo concreto de la mirada recortada y sesgada de salud que tienen la gestión municipal y la provincial”, remarcaron los concejales de Unidad Ciudadana. La convocatoria es a los medios de comunicación locales y a toda la ciudadanía.
Kilian Valdemarín tenía seis meses de vida cuando fue diagnosticado con inmunodeficiencia combinada severa. Los niños que la padecen son conocidos como los chicos de la burbuja, porque son enfermedades genéticas que dejan al individuo sin inmunidad celular, es decir, mueren rápidamente a causa de cualquier tipo de infección.
Sin embargo, Kilian recibió un trasplante inédito de médula ósea y le salvaron la vida. La donante fue su mamá –quien era compatible en un 50 por ciento– y significó un caso único en el país, ya que para evitar el rechazo se empleó un aparato de última generación que filtra los linfocitos T, las células que cumplen un rol clave en los problemas de compatibilidad.
El trasplante fue el resultado del trabajo colectivo de tres hospitales públicos del país: el Víctor J. Vilela, de Rosario; el Garrahan, de Buenos Aires; y el Ludovica, de La Plata.
Hoy Kilian tiene 6 años y todos los meses en el Hospital Vilela tiene que hacer un procedimiento de gammaglobulina para poder tener defensas. Es decir que aún se encuentra inmunodeprimido y lo va a estar de por vida. Por lo tanto, las indicaciones médicas son que viva en una casa y en un barrio con las condiciones de salubridad óptimas.
Debido a que la familia no tiene los ingresos suficientes para acceder a una vivienda digna, se necesita que el Estado se la garantice. Sin embargo esto no ha sucedido. Ahora vive en lo de su abuela, en una vivienda muy precaria en el barrio Los Humitos, donde no tiene ni agua corriente.
“Kilian es un ejemplo concreto de la mirada recortada y sesgada de salud que tienen la gestión municipal y la provincial. Este tipo de gestiones tiene un concepto de salud que se restringe a los hospitales y no contempla cómo vive la comunidad en su conjunto. Ven la salud solamente como el ámbito de tratamiento puntual o la operación de una persona y no contemplan la salud en las condiciones de vida, socioambientales, habitacionales, en crear un hábitat saludable para todos y todas las rosarinas”, señaló la concejala Marina Magnani.
“En el caso de Kilian, se ve claramente. Un niño que recibe una operación de alta complejidad, de gran avance tecnológico y lo envían a su casa, que es un rancho sin ni siquiera el acceso al agua potable”, agregó la presidenta del bloque de Unidad Ciudadana.
Al respecto, el edil de Unidad Ciudadana, Andrés Giménez, remarcó: “El concepto de salud tiene que incluir cómo vive una población, y el socialismo si bien hace mucha publicidad de su gestión en la salud pública después tiene este problema de que nunca le dan importancia a la infraestructura sanitaria y tenemos miles de personas en la ciudad que viven en condiciones de hacinamiento, con basurales, roedores, sin agua potable. Esa parte de la salud pública hoy en día no se está atendiendo”.
“En el caso de la gestión nacional de Cambiemos, en salud pública hay una indiferencia absoluta, y no existe ninguna posibilidad de apelar cuando el municipio y la provincia fallan en la asistencia y el gobierno nacional evade completamente en su responsabilidad”, subrayó el concejal.