Cien Evitas, el gran acontecimiento artístico y político que tendrá Rosario el martes 7 de Mayo como celebración del centenario del nacimiento de Eva Perón, fue presentado la semana pasada en Buenos Aires en el Instituto Patria, colmado de asistentes. Antes, la delegación de la productora autogestiva, la Colectiva Mixta de Cultura, fue recibida por Guillermo Moreno y su esposa Marta Cascales en una sede capitalina en donde se interiorizaron sobre las particularidades del evento y, además, se sorprendieron y emocionaron. Mientras tanto, en distintas sedes partidarias, clubes y bares, continúan los ensayos con los actores y los preparativos de la caravana y los shows callejeros, que se realizarán desde los barrios hacia el centro. Ya están a la venta las entradas para el espectáculo central que tendrá lugar en El Círculo, y se pueden adquirir en las boleterías del teatro.
Reunir el peronismo disperso
Carla Saccani, actriz, dramaturga y una de las coordinadoras de la Colectiva Mixta de Cultura, subraya dos cosas fundamentales en cada entrevista, en cada reunión en Buenos Aires en donde explica el proyecto Cien Evitas: primero, que además de un homenaje a Eva, en el centenario de su nacimiento, se trata de un acto político de oposición a Mauricio Macri y a su modelo económico, y que por lo tanto sigue el claro objetivo de unificar al peronismo. Segundo, se destaca la figura de Eva pero también la de Juan Perón contra la corriente que ha usado a Eva para menospreciar cuando no directamente negar, al líder del movimiento. Con esas dos premisas expresada con énfasis, la mayor parte de los interlocutores traga saliva, algunos se sorprenden, y otros simplemente lloran de la emoción.
Un sentimiento
Una de las que lagrimeará más de una vez es Marta Cascales, la esposa de Guillermo Moreno, cuando recibe y escucha a la delegación rosarina contar cómo será el homenaje del próximo 7 de mayo, que irá desde los barrios en donde aún se recuerdan los hitos de la resistencia peronista hacia el centro de la ciudad donde cien mujeres caracterizadas de Evita ingresarán por una alfombra roja al teatro El Círculo, en donde el maestro Miguel Ángel Estrella interpretará Chopin, el preferido de Evita, y luego se escenificarán textos sobre la Abanderada de los humildes escritos por más de 30 autores locales.
Las palabras del sobreviviente de la resistencia José Mármol, de 83 años, terminan por aflojar a los más duros. “En usted honramos a todos los compañeros que muriendo o sobreviviendo hicieron posible que 70 años después aún existamos. No nos pueden matar porque somos la identidad argentina”, dijo la mujer, con la voz entrecortada.
De abajo hacia arriba
Guillermo Moreno mira sorprendido, traga saliva, le parece “¡extraordinario!” cuando escucha que no hay ninguna agrupación partidaria detrás de este proyecto y se emociona.
Antes también Cascales lo destacaba: “Esto que están haciendo ustedes es el peronismo, no es que vienen y les dicen desde una estructura partidaria lo que tienen que hacer, lo hacen porque ustedes quieren, se organizan y listo, las cosas vienen desde el pueblo, del que dice el propio Perón tomó la doctrina”.
“Con lo que ustedes me cuentan −interviene Moreno− me hace pensar que valió nuestro esfuerzo”.
“Hay que dejar que florezcan las flores, en vez de todo centralizado y como si fuéramos estalinistas, vienen cuatro genios y te explican lo que hay que hacer. No, uno dice: es al revés, al peronismo hay que dejarlo caminar. Vos dejá florecer al pueblo peronista y es una cosa extraordinaria, porque es un pueblo extraordinario”, destaca el ex funcionario.
Compañeros de ruta
La delegación que viajó a Buenos Aires estuvo compuesta por los integrantes de la Colectiva Mixta de Cultura, entre ellos directores, actores, escritores, un periodista de La Masa, y un emblema, José Mármol, héroe de la resistencia peronista y cantor de tangos. El viaje fue festivo, hubo recitados, canciones, pero en plena ruta también se transformó en debate político candente, desde hasta dónde llegará el feminismo a quien ganará la interna del PJ, si Omar Perotti o María Eugenia Bielsa. Se barajaron conclusiones irónicas o tajantes, como que la que dice que a veces los peores candidatos son los mejores para ganar una elección, o que el purismo es un lujo que se dan los chetos.
De Rosario al mundo
El Instituto Patria está colmado de curiosos, de algunos rosarinos que viven en Buenos Aires y de militantes de todo el país que confluyen allí. Una agrupación universitaria llamada Les Muchaches peronistas, está interesada en replicar en parte la idea del Cien Evitas y se entrevista con anterioridad al acto. Aparece el maestro Miguel Ángel Estrella, recién llegado de París, donde reside. Apenas si dejó la valijas y se fue a la presentación de las Cien Evitas. La ex ministra de Cultura de la Nación Teresa Parodi saluda a la Mixta de Cultura, Oscar Parrilli, ex funcionario kirchnerista y presidente del Patria, anuncia que él mismo presentará a la delegación rosarina. En la mesa, hablan en nombre de la colectiva los dramaturgos y directores Saccani, Juan Carlos Capello y Armando Durá; una de las autoras y reconocida militante, Berta Temporelli y Mármol, sobreviviente de la Resistencia.
La Mixta también la integran Sol Fernández, Lala Brillos, Marta Fritschy, Emmanuel Alanis, Mauricio Vera Prato, Lionel Fuentes, Elías Blanco y Patricio Sbarbatti.
Arte político
El escritor Cristian Molina, investigador asistente de Conicet y uno de los autores de las escenas, leyó en la presentación en el Instituto Patria unas palabras sobre el proyecto Cien Evitas en las que destacó, entre otras cosas, “el casi pecado” del carácter político de la propuesta. “Como si la posición político-partidaria hiciera perder valor a la práctica artística en sí frente a otras, a las que denominan como «más neutras», «realizadas solo por que sí», «no puestas al servicio de ningún fin», «apolíticas», o «políticas pero desde lo poético», o «distanciadas de la política pero no de lo político». Esos modos de valorar, que son hegemónicos en la academia, pero que son muy insistentemente entre nuestros compañeros/ compañeras/ compañeres artistas, reproducen un criterio de evaluación fuerte que viene de la modernidad europea. El problema es que siguen reproduciendo exclusiones (…) la cuestión problemática surge cuando esa prácticas son puestas en una jerarquía superior que normaliza un lugar común mediante el cual se descalifica, se desvaloriza otro modo de entender y hacer arte”.
Hoja de ruta
El martes 7 de mayo las actividades comenzarán con la Caravana de la Cien Evitas, un espectáculo performático callejero interpretado por más de 100 mujeres y disidencias caracterizadas como Evita que llevarán adelante un recorrido en tranvía y a pie por los distintos puntos de la ciudad más icónicos para la historia del peronismo y de la militancia de nuestra ciudad. Arrancará el Monumento a Evita en Avenida del Rosario y Lituania y concluirá con la entrada de las Evitas al Teatro El Círculo para darle comienzo al espectáculo teatral que consistirá en un montaje dividido en dos actos donde se podrán ver múltiples escenas basadas de la vida y obra de Eva Perón desde la mirada de decenas de artistas del campo popular que participaron de su creación tanto en la escritura, la dirección, la actuación y la música.
Una voz que vuelve
Los textos que pondrán en escena son profundos y diversos sobre múltiples facetas de Eva Perón, que fusionan hechos históricos con posibles cruces con debates actuales. El desafío de directores y actores es muy grande. Se trabaja cada detalle gestual, cada palabra, cada concepto, y es casual que derive incluso en algún debate. Evita sigue provocando al corazón y al pensamiento.
Soy Evita
“A pesar de ser profundamente político, el homenaje a Evita va más allá de lo partidario e invitamos a todas las mujeres del campo popular, que hayan querido ser Evita alguna vez, o haya querido parecerse a ella, a sumarse”, dice Saccani. El proyecto incluye a cien mujeres caracterizadas y ya en los primeros ensayos aparece una gran diversidad de mujeres y disidencias. Las convocadas testimonian su profundo deseo de ser Evita, y a la vez sus contradicciones “porque soy negra”, o “soy vieja”, “gorda” o “fisicoculturista”.
La cuestión pasa por la “actitud Evita” para entrar en escena, el vestuario y el peinado para lo cual se bajan tutoriales que guían a las cien Evitas que participarán de la gran caravana que concluirá en El Círculo.
Nota publicada en El Eslabón Nº 400.
Hernán
21/04/2019 en 10:08
Por qué termina en un teatro y no en el monumento o el río???