El sistema de software contratado por el gobierno nacional para el escrutinio provisorio se encuentra caído a nivel nacional. La empresa venezolana Smartmatic había sido criticada por diferentes referentes quienes dieron a conocer antedentes de fallas y errores por parte de dicha empresa, durante las semanas previas a las elecciones.
Uno de los escándalos más resonantes ocurrió en 2017 en Venezuela, luego de la polémica elección de la Asamblea Nacional Constituyente. Aunque la empresa, oriunda de ese país, se encargó del sistema de votación desde 2004, esa vez, aseguró que “hubo manipulación del dato de la participación”, ya que “las cifras oficiales y las que arrojó el sistema” no concordaban. Entre el resultado provisorio y el final había una diferencia de un millón de votos.
Apenas cerraba los comicios pasadas las 18 Ricardo Olivera titular del Partido Justicialista en Santa fe sostuvo: «Empezamos a recibir denuncias de escuelas de la provincia de Santa Fe donde los fiscales informáticos no podían acceder al centro de datos ni podían sacar fotos de los telegramas»,
Ante la imposibilidad de dar marcha atrás con la contratación de Smartmatic, la jueza María Servini dispuso el pasado jueves la designación de Juan Franchino , titular de la dirección de tecnología del Consejo de la Magistratura, como veedor judicial informático.