En su primera semana de reapertura, los locales céntricos expresaron alivio al abrir nuevamente sus puertas, pero lamentaron la huelga de choferes de colectivos. “La mayoría está conforme, pero no se puede hacer un balance sin el TUP”, admitió Fabio Acosta, titular de la Asociación Casco Histórico.
La buena noticia que recibieron los locales comerciales al estar incluidos entre los rubros exceptuados de la cuarentena –en el marco de la cuarta fase anunciada por el gobierno nacional–, fue opacada en gran parte por el paro de la UTA, que desde el lunes dejó sin colectivos a posibles clientes de comercios céntricos.
“El primer paso se dio. Los comerciantes necesitaban abrir como sea. La cuarentena les causó mucho daño en lo referido a lo económico, porque tienen muchos gastos fijos y no se vende, lo que ha generado muchas deudas”, indicó Acosta en diálogo con el programa radial Poné la Pava.
El dirigente comercial aseguró que “la mayoría estaba conforme con poder abrir”, aunque aclaró: “Hay que tener en cuenta que no está funcionando el Transporte Urbano de Pasajeros, así que de alguna manera fue una semana atípica, por lo que hacer un balance sin TUP es hacerlo a media”.
“Como corolario de la primer semana, a los barrios les fue mejor, sin dudas, que al centro, donde no hubo transporte. Digo mejor porque nadie se salva de esta megacrisis anabólica (por la pandemia) que comenzó hace 4 años y medio, y empezó a despuntar hace dos”, dijo el comerciante.
Acosta también puso reparos en referencia al horario de apertura y cierre (que es de 13 a 19, para todos por igual), al explicar que “muchos plantearon la posibilidad de que se abra a la mañana, por la mayor circulación de gente, lo que queda en evidencia en las cajas: se ha vendido, pero no lo suficiente como para que podamos decir que fue una buena semana. Pero los comerciantes dicen «por lo menos abrimos» y las cajas se empezaron a mover”.
El titular de la Asociación Casco Histórico indicó que entre los rubros que más se movieron en la semana fueron indumentaria y calzado. “Sobre todo por el cambio de temporada. Lo que entorpeció las ventas fue que no se les permitía a los clientes usar el mostrador. Pensamos que a eso hay que revisarlo, porque el riesgo aumenta más cuando la gente se lleva a su casa el producto para probárselo y lo vuelve a traer”.
“Tenemos que mantener esta suerte de racha sin contagios –señala en referencia a los 19 días que acumula la ciudad sin afectados por el Covid-19–, pero simultáneamente hay que ir flexibilizando o revisando algunas metodologías para poder trabajar, porque a la economía no la podemos dejar de lado en esta situación complicada”.
Por último, el referente de los comerciantes del centro aseguró que el sector cumple “a rajatabla” con las normas de higiene y distanciamiento social en sus locales: “Los comercios tienen su protocolo al día, estamos muy conformes en ese sentido”, concluyó.
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