El doctor en medicina e investigador del Conicet, Jorge Kohen, resalta el valor del cuidado colectivo y de las políticas integrales de salud en la etapa actual del Covid en la Argentina. También recuerda que la pandemia no terminó y que hay que entenderla en su complejidad, para evitar los reduccionismos biologicistas.
Kohen realiza este análisis en un artículo titulado Cuidado colectivo en la nueva etapa de la pandemia, publicado en el N° 5 de diciembre pasado de Hilo Rojo, el boletín de la Asamblea de Trabajadorxs por la Salud Colectiva.
“La pandemia no había ni ha terminado. La pandemia es un fenómeno complejo y como tal debe ser analizado y las respuestas no pueden ser unidimensionales ni exclusivamente biologicistas”, dice en el inicio de esa nota de opinión. y habla entonces de tres dimensiones que operan de manera simultánea: la sanitaria, la económica-productiva, y la ideológica-política-cultural.
También señala que “intentar dar respuestas exclusivamente desde lo biológico y hasta lo psicológico sin intervenir sobre las otras dimensiones es una limitación de política sanitaria, que, como queda en evidencia, no logra resolver el problema y mucho menos terminar con la pandemia”.
En esa misma reflexión, recuerda que luego de haberse logrado aplastar la curva de contagios entre agosto y fines de noviembre pasado, “los casos comenzaron a aumentar y en tres semanas se triplicaron”.
“Como en los ciclos anteriores -escribe Kohen- sabíamos que ocurriría, lo estábamos viendo, lo anunciaba la Organización Mundial de la Salud y daba las alertas para tratar de evitar que se repitieran situaciones ya vividas, pero una vez más fuimos incapaces de evitarlo. A pesar de lo evidente se repite una vez más la historia, la apertura apresurada y descontrolada de las fronteras del país, las presiones mediático políticas económicas y dejar librado al cuidado individual de las personas, que regeneran el ciclo de las olas anteriores: comienza con casos importados, continua con los contactos estrechos y de allí se instala la circulación comunitaria del virus que provoca la Covid-19”.
Tras ese repaso Jorge Kohen expresa que este nuevo momento de la pandemia se diferencia por “la exitosa campaña de vacunación garantizada por el Gobierno Nacional y el alto nivel de población vacunada en la Argentina”. Una referencia que hace valer también para Rosario.
En su análisis, Kohen retoma las declaraciones a Radio Nacional del científico y biólogo Ernesto Resnik (del 20 de diciembre pasado) quien alerta frente al incremento de casos y la presencia en diversas provincias de la variante Ómicron, que quien no se haya vacunado terminará infectado sí o sí. También que quienes estén inmunizados “no tienen completa protección al contagio del virus, pero tienen casi completa protección a que no les haga un daño grande”. En cambio, aquellos que no estén vacunados tienen “chances más altas de transitar la enfermedad de forma grave”. “El asunto -cita las palabras de Resnik- es que las vacunas nos mantienen con una inmunidad saludable, de modo tal de no llevarnos al hospital. No tenemos completa protección a no contagiarnos el virus, pero tenemos casi completa protección de que no nos haga un daño grande”. Por eso, “lo único que nos queda es insistir con la vacunación”, inclusive con políticas como las del pase sanitario.
Kohen enfatiza así la importancia del “cuidado colectivo, más políticas y Sistema Integral e Integrado de Salud en la etapa actual del Covid en la Argentina”. También “la necesidad de organizar el cuidado colectivo en una acción coordinada entre el Estado, lxs trabajadorxs de la salud y la comunidad a través de las diversas formas que adquieren las organizaciones populares”.
El investigador y docente universitario afirma que ese cuidado colectivo “comienza por cuidar a los que cuidan”. Y sobre esto remarca la necesidad de que los gobiernos provincial y municipal atiendan los reclamos de las y los trabajadores de la salud. Entre otras de esas demandas están las de contar con salarios justos y terminar con la precarización laboral. Además del “fortalecimiento y crecimiento del sector público de salud en infraestructura, equipamiento, medios de detección tempranos de presencia de Covid (testeos rápidos y PCR) gratuitos”, entre más reclamos.
Para Kohen seguir garantizando desde el Estado la atención sanitaria en la pandemia resulta sustancial por razones de derecho y también porque desnudan la desigualdad e ineficiencia del sector mercantil de la atención de la enfermedad.
El doctor en medicina y educador Jorge Kohen afirma así que asegurar el cuidado colectivo “es parte de la batalla por la rehumanización de lo humano, de que la solidaridad y la creación y consolidación de nuevos lazos sociales permitan enfrentar las manifestaciones del odio que encarna lo que hemos denominado la Variante Milei”.
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El #5 de Hilo Rojo -se anticipa en la presentación- se proponen analizar en qué etapa de la pandemia se está, cuáles serían las condiciones y medidas para garantizar el cuidado colectivo, poniendo la lupa sobre las desigualdades que generó. También, entre otros temas, se analiza el papel de los medios de comunicación en la pandemia, y la formación integral sanitario política de las y los trabajadores de la salud.
Escriben en este número Ariel Blajos, Marité Colovini, Erica Togachensko, Lucas de Candia, Valeria Bulla, Mariana Quignard y Milena Marro. También integrantes del equipo de coordinación de la carrera de posgrado de especialización en medicina general y familiar de la Facultad de Ciencias Médicas (UNR). Además del Colectivo Ciencia Rosarina contra el Coronavirus.
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