La Universidad Abierta Interamericana y la Universidad de Concepción del Uruguay difundirán en Rosario su propuesta para frenar el drama del fuego en las islas, que no es ni con los bomberos para apagar las llamas ni con la policía para meter presos a los incendiarios. La idea es “aprovechar la biomasa que anualmente produce el rebrote de los pajonales del Delta, y que habitualmente se quema con graves perjuicios ambientales, para la producción de biocombustibles líquidos alternativos para el transporte”.
La iniciativa se empezó a proponer a los gobiernos de las provincias de Santa Fe, Entre Ríos y Buenos Aires; y las universidades privadas embarcadas en el proyecto abogan por realizar primero “un estudio de prefactibilidad a fin de determinar, con base científica seria, el posible aprovechamiento de la masa del BioDelta Paraná-Plata”.
Según se indica en una gacetilla difundida a los medios, en la que se invita a una jornada a realizarse el 27 de agosto, con el estudio se apunta a tener datos sobre el impacto del cambio climático sobre el territorio deltaico, el impacto sobre el ecosistema que produciría la cosecha de los rebrotes y cuáles serían las especies más aptas desde el punto de vista del volumen y calidad de las biomasas.
También se pretende realizar análisis, evaluación, clasificación y cuantificación de las áreas aptas para producir biomasa cosechable, para luego plantear el desarrollo de procesos para convertir la biomasa en biocombustibles con minimización de la utilización de energía y catalizadores químicos contaminantes.
Todo se completaría con el desarrollo de la línea de maquinaria agrícola apta para cosechar el rebrote de los pajonales del territorio deltaico.
“El punto de partida es el aprovechamiento de la biomasa -que actualmente se incendia en el Delta- para su utilización en la producción de biodiesel y otros biocombustibles. Se reemplazarían así los trastornos ocasionados por los incendios, por un proyecto productivo para la provisión de energía”, explican desde las universidades.
El proyecto es dirigido por el arquitecto Juan Manuel Borthagaray (doctor honoris causa de la UBA, ex decano de Arquitectura en la misma universidad) e integran el grupo académicos de distintas carreras entre los que se cuentan Rodolfo Néstor De Vincenzi, Silvia Alonso, Roberto Feldkamp, Fernando Vilella y Mariano Grasselli.
La jornada del 27 de agosto, en la que se difundirán detalles del proyecto, comenzará a las 18 y se realizará en el aula magna ubicada en el décimo piso de la sede de la UAI de avenida Pellegrini 1618.