El jefe de Gabinete, Aníbal Fernández, manifestó que el Gobierno está “en contra absoluta” de los carteles aparecidos en la vía pública con fotos de periodistas del Grupo Clarín, y consideró que el tribunal popular contra esos profesionales que anunciaron las Madres de Plaza de Mayo para la semana próxima constituye un “acto político, sin ningún valor jurídico”.
“Los escraches no me gustaron nunca. Estoy en contra absoluta (de ellos). Es una forma horrible de expresarse, para un lado o para el otro. No da beneficios y es una forma de disociación de la sociedad”, dijo Fernández en declaraciones a radio Continental.
En cuanto al enjuiciamiento público que anunciaron las Madres para el próximo jueves, el jefe de Gabinete dijo que se trata de “un acto político, que tendrá como resultado quejarse sobre determinada persona, pero no tiene valor jurídico”.
“Es un acto político y tienen todo el derecho del mundo (a hacerlo). La libertad conquistada por los argentinos permite que se hagan estas cosas, así como lo hace la izquierda y el impresentable de Pino Solanas”, añadió.
Sobre los afiches, que aparecieron en las calles porteñas con los nombres de 12 periodistas de distintos medios del Grupo Clarín, Fernández dijo no saber “quien los hizo” ni que “objetivo se persiguió” con esa metodología.
“No me gusta, no estoy de acuerdo con esas cosas, nunca, con ningún tipo de escrache. No es constructivo, no es saludable. Esa es mi visión personal”, dijo y agregó que “sería piola que el que los hizo lo diga”.
El jefe de los ministros dijo que pese a que “con muchos de los periodistas (aparecidos en el afiche) no tengo una visión parecida, prefiero levantar el teléfono, hablar y debatir porque me gusta el ruido que genera la democracia”.
(Fuente: Télam)
