El Tribunal Oral federal 1 de La Plata condenó este jueves a prisión perpetua al ex Jefe de la Unidad 9, Alberto Dupuy y a otros tres agentes penitenciarios por torturas y homicidios ocurridos en esa cárcel durante la última dictadura militar. El Tribunal oyó a más de un centenar de testigos, entre ellos Francisco "Barba" Gutiérrez, Carlos Slepoy, Juan Miguel Scatolini, Eduardo Jozami, Eduardo Anguita, el Premio Nobel de la Paz, Adolfo Pérez Esquivel y el ex canciller Jorge Taiana.
Las condenas, que fueron desde prisión perpetua hasta diez años de prisión, la dictó el tribunal integrado por Carlos Rozansky, Mario Portela y Roberto Falcone, por crímenes de lesa humanidad cometidos en el marco de un genocidio.
Dupuy fue condenado a prisión perpetua por cinco casos de homicidio calificado por alevosía, torturas seguidas de muerte en un caso y tormentos agravados por ser perseguidos políticos en 57 casos.
La misma pena recayó sobre Isabelino Vega por un homicidio calificado, un caso de torturas seguida de muerte y tormentos en otros 54 casos, lo mismo que Victor Ríos por un caso de homicidio calificado, una de torturas seguido de muerte y tormentos agravados en 55 casos.
El Tribunal condenó también a prisión perpetua a Raúl Aníbal Rebaneyra por un homicidio calificado y 20 casos de tormento agravado.
Además, condenó a 25 años de prisión a Elvio Cosso por tormentos agravados en 43 casos y tortura seguida de muerte; a Catalino Morel por omisión de tortura seguida de muerte y a Ramón Manchado Fernández por un caso de torturas seguida de muerte y tormentos agravados en otros 13 casos.
El Tribunal sentenció además por tormentos agravados en varios casos a Jorge Luis Peratta a 14 años de prisión; a Segundo Andrés Basualdo a 11 años y a 10 años de prisión a Valentín Romero y Héctor Acuña.
También les impuso 13 años de prisión a Carlos Domingo Jurio, Enrique Leandro Corsi y Luis Domingo Favole, los tres médicos juzgados por omisión de torturas seguida de muerte, a quienes les ratificó que deberán seguir detenidos.
En la lectura del veredicto, que se extendió por casi 40 minutos, el presidente del Tribunal, Carlos Rozansky, anunció que atento a la magnitud de las penas impuestas se revocará la prisión domiciliaria de Elvio Cosso, Isabelino Vega y Ramón Fernández y Valentín Romero".
Además, durante la lectura del veredicto en la que estuvo presente el secretario de Derechos Humanos de la Nación, Luis Eduardo Duhalde, se informó que los fundamentos de la sentencia se darán a conocer el próximo 23 de noviembre.
Los once agentes penitenciarios y tres médicos que se desempeñaban en la unidad 9 de La Plata comenzaron a ser juzgados en abril pasado por los homicidios de Horacio Rapaport, Juan Carlos Deghi, Ángel Georgiavis, Rufino Pirles y Dardo Cabo; la muerte por torturas de Alberto Pinto y la privación ilegítima de la libertad y torturas a más de 80 ex presos políticos.
El penal platense fue una de las cárceles que recibió más presos políticos durante la última dictadura militar, debido a que los detenidos provenían de otros centros clandestinos de detención y al llegar a ese penal eran "blanqueados", aunque las torturas continuaban.
Varios de los detenidos que fueron liberados eran asesinados a la salida de la prisión, con el fin que quedara asentada su salida formal de esa unidad carcelaria.
Durante las audiencias, el Tribunal oyó a más de un centenar de testigos, entre ellos Francisco "Barba" Gutiérrez, Carlos Slepoy, Juan Miguel Scatolini, Eduardo Jozami, Eduardo Anguita, el Premio Nobel de la Paz, Adolfo Pérez Esquivel y el ex canciller Jorge Taiana.
El ex canciller relató sus días de cautiverio en el pabellón de la muerte de esa unidad y dio detalles sobre las ejecuciones de cuatro compañeros.
Tras recordar una violenta requisa sufrida el 13 de diciembre de 1976, donde fueron golpeados todos, quedó alojado en el Pabellón de la Muerte, llamado así porque de ahí sacaban gente que era ejecutada extrajudicialmente. Eramos 14 personas, mataron a 4, consignó.
En otro relato, Pérez Esquivel, quien estuvo detenido en la unidad 9 a disposición del Poder Ejecutivo Nacional (PEN) desde el 5 de abril de 1977 hasta fines de junio de 1978, recordó que estuvo a punto de ser asesinado en un vuelo de la muerte.
Lo más shockeante de la prisión era oir los gritos de los compañeros que eran golpeados, recordó, y remarcó que en el penal había un sistema para quebrarnos, moral, psicológica y humanamente.
Finalmente, el 27 de septiembre último comenzó la etapa de los alegatos y ese día los fiscales Marcelo Molina y Hernán Shapiro pidieron 25 años de prisión para el ex jefe del penal 9 de La Plata Abel Dupuy; Ramón Fernández, Catalino Morel, Raúl Rebaynera, Víctor Ríos e Isabelino Vega.
Durante la exposición de su alegato, la fiscalía sorprendió al Tribunal y a los presentes por recaratular el delito que se imputaba a los tres médicos juzgados: Luis Favole, Enrique Corsi y Carlos jurio.
Si bien los tres médicos penitenciarios llegaron al juicio imputados de omisión de evitar torturas al preso Alberto Pinto, durante el desarrollo del juicio la fiscalía pidió y obtuvo que se recaratulara ese delito como tortura seguida de muerte, lo que provocó que los tres facultativos, que estaban excarcelados, fueran detenidos.
Molina dio marcha atrás con esa caratulación y pidió la pena de 10 años de prisión para cada uno de los médicos por el delito de "omisión de evitar torturas", lo que provocó el rechazo de los organismos de derechos humanos que son querellantes en este juicio.
La fiscalía pidió para Elvio Cosso, 18 años de prisión; 14 años de prisión para Jorge Luis Peratta; 8 años para Segundo Andrés Basualdo; 10 años de prisión para Valentín Romero y la misma pena para Héctor Acuña.
Para Dupuy se pidieron 25 años de prisión por 56 casos de tortura, 4 homicidios, 5 privaciones ilegales de la libertad y un caso de tortura seguida de muerte.
El 4 de octubre expusieron sus alegatos los abogados defensores de los imputados y, en líneas generales, pidieron que no se califique los hechos como delitos de lesa humanidad y que no se aplique la figura de genocidio.
Además, pidieron la absolución o, en caso contrario, que se apliquen las penas mínimas.
En la oportunidad, para decir sus últimas palabras Abel Dupuy, ratificó que las órdenes en el penal las imponía el ejército y acusó al Tribunal de juzgar la mitad de la historia del país de los años 70".
Los inocentes testigos (que prestaron testimonio en el juicio) que hoy nos acusan de asesinos son los terroristas que en los 70 desangraron a nuestra Patria y mataron a jueces y abogados", concluyó.
(Fuente: Télam)