La escuela Nº 1.333, Nueva Esperanza, se anegó este miércoles debido a las intensas lluvias que cayeron desde el martes por la noche, y la capacitación a los docentes, por la boleta única, debió realizarse en una sala plagada de goteras.
La institución ubicada en Garzón al 4300 del barrio Toba, a la que asisten 700 alumnos, se inundó producto de la feroz tormenta que se registró en la zona en horas de la noche del último martes. Una docente de la institución describió la situación que debieron afrontar a la mañana siguiente señalando que “el agua llegaba al tobillo y que no es la primera vez que se inunda".
"Dicen que la escuela está mal construida pero ni los docentes ni los alumnos tenemos la culpa, esto pasa por las autoridades superiores”, se lamentó otra profesora que se encontraba en el lugar.
Debido a la capacitación docente sobre el uso de la boleta única prevista para este miércoles en varias escuelas, los alumnos no asistieron a clases y no debieron soportar la acumulación de agua en todo el edificio, mientras que los maestros y profesores, que sí concurrieron, tuvieron que conocer los pormenores del nuevo sistema electoral en un salón donde “caían gotas por todas partes”.
Actualmente el establecimiento escolar está siendo refaccionada por lo que el dictado de clases fue reducido a sólo dos horas por turno. Además de esta complicación, los docentes denunciaron el cierre del comedor.
