Amarillos 1. Las estrellas cariocas no gravitaron frente a los bolivarianos.
Amarillos 1. Las estrellas cariocas no gravitaron frente a los bolivarianos.

La Copa América arrancó sin mayores emociones. Desde la descepción inaugural de los locales, se sucedieron este domingo los empates de Brasil frente a Venezuela y el de Paraguay-Ecuador, ambos sin goles. Sólo Colombia rompió la monotonía con su triunfo frente a la invitada Costa Rica.

El conjunto de Brasil salió a la cancha de la mano de su técnico, Mano Menezes, con la impronta y la convicción de un triunfo seguro en La Plata, frente al modesto equipo venezolano.

Sin embargo, los 32 mil espectadores que en su mayoría auguraban la victoria aplastante del pentacampeón, se fueron sin penas ni glorias ni el consuelo que les hubiera significado algo del buen juego que quisieron, pero no consiguieron demostrar sus principales figuras: Alexandre Pato, Robinho y Neymar.

Rompiendo con los grises empates de las grandes candidatas, la selección de Colombia logró la única victoria en lo que va del torneo, aunque ajustada, ante su igual de Costa Rica, superándola por 1 a 0 gracias a una acción individual -de las pocas del partido– de Gustavo Ramos, pero que logró ubicar al conjunto caribeño como líder del grupo A y única selección que sumó de a tres en el grupo que es integrado por Argentina y Bolivia.
 

A última hora del domingo, la selección de Paraguay empataba también sin goles contra Ecuador, en el debut del grupo B, en un partido en que para el Tata Martino –DT de Paraguay– la selección guaraní jugó "los mejores minutos de la Copa".

Este lunes, en tanto, se enfrentarán en San Juan por el liderazgo del grupo C, Uruguay-Perú, a las 19.15, y Chile-México a las 21.45 con la esperanza de sembrar algunos goles en la magra cosecha del torneo más importante de fútbol del globo, después del Mundial.

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