El crack argentino Lionel Messi convirtió este miércoles dos goles y dio una asistencia perfecta, en la victoria por 3-2 que el Barcelona edificó sobre el Real Madrid para conquistar su décima Supercopa de fútbol de España.
“Messi…Messi…Messi”, coreaban al unísono las más de 90 mil almas que colmaron el estadio al ver como el equipo de Pep Guardiola, liderado por el argentino, les ofrecía un nuevo título, el primero de la temporada, y nada menos que ante su eterno rival, el Real Madrid.
Un partido con todos los condimentos, animado por el talento de los jugadores del Barcelona, la rivalidad y dureza del Real Madrid, que si bien mostró un juego vertiginoso volvió a recurrir a la agresividad para intentar frenar la habilidad azulgrana.
El conjunto catalán, en el que también fue titular el argentino Javier Mascherano, tuvo su debut deseado con victoria y estreno de su nueva estrella, el ex capitán del Arsenal inglés, Cesc Fábregas, que ingresó en el segundo tiempo en sustitución de Pedro.
En tanto, el argentino Angel Di María arrancó desde el comienzo en el Real Madrid y fue sustituido por otro argentino, Gonzalo Higuaín, en el minuto 64.
El Barcelona comenzó a escribir la historia cuando el gol de Iniesta encendió la ilusión a los 14 minutos de la primera parte con un disparo sutil sobre Casillas luego de una asistencia en profundidad de un Messi clarividente, en una combinación de movimientos que hizo vibrar a la hinchada.
Sin embargo, cinco minutos después Cristiano Ronaldo empató el partido con un sorpresivo disparo que silencio el Camp Nou, atónito y enfurecido con la estrella blanca a la que regaló un baño de silbidos.
Pero una vez más, ahí estaba Lionel para cambiar la historia y devolver la esperanza a su equipo, al que regaló un gol cuando faltaba solo un minuto para el descanso. Un tacón de Piqué dejó solo a "La Pulga", que no perdonó a Casillas.
A pesar de que el Real Madrid había tenido oportunidades claras en los botínes de Cristiano, Ozïl y Benzema, los blancos se fueron al descanso con el sabor amargo de la derrota momentánea.
Ya habían desperdiciado su oportunidad de oro en el partido de ida del pasado domingo en el Santiago Bernabéu cuando fueron superiores a los catalanes, pero estos fueron más eficaces y sacaron un empate por 2 a 2.
El estado físico y la agresividad mostrada por el conjunto blanco habían generado preocupación en Guardiola, quien, no obstante, confiaba en la mentalidad de sus jugadores para salir adelante y conquistar un trofeo aferrándose a su estilo de juego.
Con el partido encaminado a favor de los culés, en el segundo tiempo Mourinho comenzó a hacer cambios para tratar de revertir la situación, algo que consiguió de forma momentánea.
A medida que avanzaba el reloj y los jugadores mostraban signos de cansancio también se incrementó la tensión y comenzaron a aflorar las tarjetas.
El ingreso de Higuaín y Kaká, que sustituyó a Ozïl, aportó cierta frescura a los blancos que la necesitaban. Benzema, en el minuto 81, consiguió empatar y amenazó con llevar el partido a la prórroga.
No obstante, ahí estaba Messi para salvar al Barcelona con un gol que hizo explotar de júbilo al técnico, a sus compañeros y a la hinchada cuando el contador marcaba el minuto 88.
Una jugada de toque y combinación de la que participaron Adriano y Cesc Fábregas, y que Messi sentenció con su zurda privilegiada.
Era el decimosexto gol de Messi al Real Madrid, que ya no tenía nada que hacer ante el jugador que, sin duda, ya es su peor pesadilla.
Una tarjeta roja y expulsión directa para Marcelo aportó un final gráfico para un Real Madrid desesperado y desesperanzado. Si Mourinho agita con sus gestos a la hinchada culé, Messi es el encargado de llevar calma e ilusión.
Síntesis
Barcelona: Valdés; Alves, Mascherano, Piqué y Abidal; Busquets (Keita 85m.), Iniesta y Xavi; Pedro (Cesc 82m.), Messi y Villa (Adriano 73m.).
Real Madrid: Casillas; Ramos, Carvalho, Pepe y Coentrao; Xabi Alonso y Khedira (Marcelo 45m.); Di María (Higuaín 63m.), Özil (Kaká 78m.) y Cristiano; Benzema.
Goles en la primera etapa: 15m. Iniesta (B), 20m. Cristiano Ronaldo (RM) y 45m. Messi (B).
Goles en la segunda etapa: 36m. Benzema (RM) y 43m. Messi (B).
Incidencias: segundo tiempo, expulsados Marcelo (49m.), Ozil (50m.) y Villa (50m).
Público: 92.965.
Fuente: Télam
