A raíz de la intensa ola de especulaciones sobre los motivos de la tragedia ferroviaria que este jueves dejó un saldo de tres muertos y más de 190 heridos, el ministro del Interior, Florencio Randazzo, hizo «un llamado a la responsabilidad y cautela», para primero «determinar si se trató de un siniestro o un accidente”, ya que “si se pudo evitar, no fue accidente», consideró el funcionario.
Randazzo explicó que la formación del tren Sarmiento que chocó contra otra en Castelar «había sido reparada» recientemente.
«El tren chapa 1 que chocó tenía frenos nuevos. Había sido reparada junto con otras 11 formaciones», contó el funcionario. Añadió que «la formación que chocó tenía frenos nuevos, los frenos fueron cambiados en su totalidad y el tren está provisto de una caja negra que registra la velocidad», apuntó el ministro.
En este marco, dijo que desde el Gobierno hacen «un llamado a la cautela frente a un hecho grave». Y que «el motorman y el ayudante están incomunicados. Por eso pedimos seriedad».
En el accidente de la estación Castelar, y de acuerdo a los últimos datos brindados por fuentes policiales, suman tres los muertos y más de 190 los heridos. Se trata de dos hombres y una mujer.
Los heridos se encuentran en el Instituto Güemes de Haedo y los hospitales de Morón, Posadas, Merlo y San Isidro, según dijo Mariana Fasciolo, directora de prensa del Municipio de Morón.
Si bien en un principio se informó que eran dos mujeres y un hombre los fallecidos, fuentes policiales rectificaron la información y dijeron que se trata de dos hombres y una mujer.
Desenfreno
Según la empresa prestadora del servicio de la línea Sarmiento el tren no frenó ante las señales de peligro. En un comunicado que difundieron en horas del mediodía la firma sostiene que «en los instantes previos al impacto, de acuerdo al análisis que surge del monitoreo satelital, la formación frenó normalmente en Morón”, pero no se detuvo ante la señal de “peligro”.
El escrito sostiene que luego de detenerse en Morón, “la formación chapa 1 cruzó una primer señal a «precaución» (lo que determina que debe bajar la velocidad) y las siguientes tres señales a «peligro». De acuerdo al reglamento operativo, ante una señal de peligro el conductor debe detener completamente la formación, situación que no ocurrió».
«La formación Chapa 1 tuvo una intervención profunda recientemente, con una reparación general de bogies, renovación total del sistema de frenos Knorr-Bremse y reparación de equipos eléctricos, entre otros trabajos menores», se agrega.
El comunicado reitera que «los coches se encuentran habilitados por el Consejo de Profesionales de Ingeniería Mecánica y Electricista el pasado 11 de marzo de 2013».
«La empresa lamenta profundamente la situación acontecida. Todo su personal está abocado a resolver lo ocurrido, quedando a disposición de los heridos y familiares», subraya el texto.
Finaliza aclarando que «el sistema de señales funcionaba al momento del accidente».
