Litoral Gas emitió un comunicado responsabilizando de la tragedia de calle Salta al gasista y al consorcio. Por su parte, Hugo Bufarini, abogado del gasista Carlos García, cuestionó la solicitada: «Deberían explicar por qué hacen controles que antes no».
“Quienes integramos Litoral Gas hemos guardado hasta ahora un prudente silencio, evitando realizar cualquier tipo de declaración publica sobre la penosa tragedia acontecida el pasado 6 de agosto en el edificio de Salta 2141 de nuestra ciudad”, arranca el comunicado de la empresa emitido este lunes por la mañana.
Luego, puntualizó en varios íntems el accionar de la prestataria relacionado al edificio siniestrado y concluye que la responsabilidad de la explosión es del gasista y su ayudante, quienes a pedido del consorcio, efectuaron sin avisar el cambio del regulador.
Más adelante repasa los resultados de las pericias: «La propia Fiscalía informó por un medio televisivo que la válvula de cierre funcionaba correctamente». También menciona las pericias realizadas en Rosario y Mar del Plata que «confirmaron que la válvula de servicio se encontraba abierta y funcionaba perfectamente; que el trabajo del primer gasista solucionó la pérdida y no tenía defectos».
Según la empresa «el consorcio del edificio decidió cambiar el regulador y contrató para esa tarea a otro gasista sin comunicarles ‘de ninguna forma’, con lo cual la válvula permaneció abierta. El día 6 de agosto, sin conocimiento de Litoral Gas, el gasista y su ayudante cambiaban el regulador».
“De esta conjunción de elementos se evidencia con absoluta certeza que, sin dar aviso, se procedió a a desmontar la parte de la cañería donde se hallaba el regulador, sin haberse cerrado la válvula de ingreso de gas, lo que provocó un masivo escape de gas a presión al interior del edificio cuya acumulación causo la explosión”, finaliza la solicitada.
Por otra parte, Hugo Bufarini, abogado del gasista Carlos García que trabajó en el edificio el día de la explosión cuestionó a Litoral Gas por el comunicado y sostuvo que «la empresa debería explicar por qué ahora realiza controles y procedimiento que antes no hacía».
«Por qué ahora se toman tantos recaudos y hasta se dejan a los edificios treinta días sin el servicio ante reclamos por fugas de gas», se preguntó Bufarini.
Por último, el abogado se refirió a su defendido: «Está desocupado ya que socialmente no puede trabajar. Está bajo tratamiento psiquiátrico y psicológico. Y acarrea sobre sus espaldas una terrible carga anímica que la va a llevar de por vida».
Fuente: Lt8 / Rosario 3.
