Sadop alertó sobre siete cesantías sin justa causa en colegios de la provincia. Advierten un ajuste del sector y proponen que el Ministerio Educación quite el subsidio a establecimientos que despidan a sus trabajadores.

A raíz del despido sin causa justa de una preceptora del colegio San Francisco Solano, de Mendoza y Río de Janeiro, que desde octubre pasado contaba con la titularidad del cargo,  el gremio de los docentes de la educación privada informó que ya son siete las cesantías en colegios e institutos privados de la provincia, desde finales del ciclo lectivo 2015.

Al advertir un posible ajuste del sector, el secretario general del sindicato, Martín Lucero, adelantó que por estas horas, el gremio intentaba evitar otros dos despidos más en colegios privados de Rosario. “Tememos que se desate una vorágine de despidos en la docencia del nivel privado, cuyos establecimientos funcionan con dineros públicos, porque es el Estado provincial  el que paga los sueldos del personal de las escuelas privadas de la provincia”, destacó el dirigente.

Además, desde Sadop decidieron promover en la Legislatura provincial un proyecto de ley que quite el subsidio estatal a los establecimientos de enseñanza que despidan sin causa a sus trabajadores. “La Legislatura no puede sancionar los despidos, pero sí puede quitarle el subsidio a los que echan docentes sin causa. Porque ese subsidio es dinero público y el Estado debe velar por el destino de sus recursos», señaló Lucero.

En tanto desde el Ministerio de Educación de la provincia manifestaron preocupación por los despidos pero descartaron que se trate de un plan de ajuste. “Es preocupante y condenamos los despidos arbitrarios», sostuvo Carlos Battaíno, director de Gestión Privada del Ministerio de Educación provincial, en declaraciones al portal Rosarioplus.com, aunque añadió: «No creo que se venga un ajuste porque en todos estos casos, los docentes cesanteados han sido reemplazados por otros».

Los despidos

La sucesión de despidos comenzó a fines del año pasado en empezaron el año pasado, en el colegio católico Lasalle Jobson, de Santa Fe. Los dueños echaron sin causa a las vicedirectoras del nivel inicial y del nivel primario, y a un profesor de Educación Física. Luego, el colegio Adoratrices de Santa Fe, echó a una profesora del nivel secundario sin justificación. El otro despido, también en la ciudad de Santa Fe, ocurrió el mes pasado en el jardín de infantes de la escuela Leonardo Da Vinci, del Club Atlético Unión de Santa Fe, que prescindió de una de las docentes sin dar explicaciones.

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