Transportistas de vehículos para personas con discapacidad reclaman “una respuesta estatal” para paliar “la suba de costos” que impacta en el sector. Harán un paro con movilización el miércoles 23 de noviembre. “La crisis golpea y no atiende ni entiende de sensibilidades”, plantean.
Los transportistas de personas con discapacidad tanto física como intelectual nucleados en la Asociación de Transportistas Especiales de Santa Fe (Atraes), dieron a conocer la realidad del sector este lunes, a través de un comunicado de prensa. “Hoy tenemos compañeros con riesgo laboral”, dijo Pablo Bolego, presidente de la entidad.
Según Atraes, en Rosario y zona “son unos 300 trabajadores los que poseen licencias para ejercer en el rubro y vienen planteando la crisis en el sector”. Bolego indicó que los principales problemas son “el aumento de costos y el freno en la tarifa (arancel) que reciben de las obras sociales, arancel que es estipulado por el ministerio de Salud de la Nación”.
“Hemos recibido en este año un aumento del arancel de un 24 por ciento y los costos se han ido entre un 40 y 50 por ciento”, remarcó Bolego
Los Transportistas enumeraron que los aumentos que sufrieron se dieron en rubros como “seguros combustible (gas), cubiertas y mantenimiento del coche en general”. Además, plantearon, “el problema grave se suscita con la renovación de unidades, cuyo tiempo vida útil es 10 años”. “Hoy muchos compañeros no la pueden renovar y eso significa quedarse sin trabajo”, dijo el titular de Atraes.
Bolego planteó que la situación “deteriora el servicio y nosotros trabajamos con personas con diferentes discapacidades”. “Estamos con riesgo de pérdida de calidad del servicio”, alertó.
“Estamos exigiendo un urgente reacomodamiento del arancel, si no nos llevan a medidas drásticas, así el sector trabaja a perdida”, expresó Bolego, quien se quejó además que “una de las obras sociales mas importante del país, como Pami, no está pagando a término, lo que lleva atrasos prolongados y esta situación afecta mucho más a nuestro sector”.
