El tenista Renzo Olivo, 91º del ranking mundial, eliminó a Jo-Wilfried Tsonga (11º) y avanzó a la segunda ronda de Roland Garros en su primera participación en un Grand Slam. Comparó la felicidad que sentía con una posible vuelta de Messi a Newell’s, el club de sus amores.
El rosarino, de 25 años, dio la gran sorpresa al superar a un jugador de primerísimo nivel en su primera incursión en uno de los torneos más importantes del planeta tenístico. Olivo, que supo ingresar al estadio Marcelo Bielsa con la réplica de la Copa Davis lograda en 2016 por el equipo argentino, del que fue parte aunque no jugó ni un partido, se dio el gusto de vencer, por 7-5, 6-4, 6-7 (6) y 6-4, al francés Tsonga en su propia tierra y con todo el público en contra.
El match había comenzado el martes pero debió ser postergado por falta de luz, cuando el rosarino se imponía por 5-4 en el cuarto set y luego de tres horas y 24 minutos de juego.
En la reanudación, disputada este miércoles en la cancha central del complejo ubicado en la zona de Bois de Boulogne, el francés tenía el saque a su favor pero se encontró en desventaja y llegó a padecer tres match points. Apoyado por el público presente, Tsongá logro recuperarse de esas tres situaciones adversas pero la cuarta fue la vencida y Olivo, que había perdido en la ronda inicial en sus cinco presentaciones anteriores (Montecarlo, Barcelona, Estoril, el Challenger de Aix en Provence y Lyon), esta vez no perdonó.
“Fue difícil conciliar el sueño, regresé al hotel pasada la medianoche y con la adrenalina era complicado dormir”, dijo emocionado el rosarino y comparó la feclicidad que sentía en ese momento con la posible vuelta de Messi, su máximo ídolo, a Newell’s, el club de sus amores.