El periodista y biógrafo de Jorge Sampaoli –a quien conoce desde su Casilda natal hasta el arribo al combinado nacional– repasó la vida futbolística y social del Zurdo, en el inicio de un nuevo capítulo de su historia.
La biografía autorizada No escucho y sigo de Jorge Sampaoli tendrá que seguir escribiéndose. Así lo entiende su propio autor Pablo Paván, en el inicio de un nuevo episodio en la trayectoria del ex jugador y técnico de Alumni de Casilda, hoy devenido, nada menos, que en entrenador de la Selección Argentina. “Lo veo tranquilo y capacitado”, asegura el joven periodista, que repasó en su libro la vida del Zurdo desde su etapa con pelos, cuando era un pibe que alertaba a parientes y conocidos sobre la presencia de algún Falcon verde de los milicos durante la dictadura. “Siempre ha dejado en claro cuáles son sus convicciones”, destaca el cronista.
Buenos vecinos
“A Jorge lo conozco de toda la vida porque vivía a media cuadra de la casa”, cuenta este volante central frustrado, que sólo alcanzó a jugar en categorías menores del club de sus amores, cuando su ídolo daba sus primeros pasos en la conducción técnica. Y así recuerda al primer Sampaoli: “En ese momento él era DT de Alumni y yo un chico más del barrio que me apasionaba mucho el deporte, entonces le prestaba más atención que al resto de los vecinos por una cuestión lógica y porque además ya tenía una personalidad particular”.
“Yo jugué en ese club, pero cuando él dirigía la Primera yo tenía 6 años. Así que lo que viví fue como hincha y como vecino del barrio”, reconoce sobre el hombre que comenzó a ganar popularidad en la zona por la curiosa foto dirigiendo un partido desde arriba de un árbol, luego de una expulsión producto de protestas elevadas de tono.
Aquella imagen llamó la atención del nefasto ex presidente de Newell’s, Eduardo López, quien le propuso hacerse cargo de Argentino, en épocas en que el club de barrio Sarmiento era gerenciado por la entidad del Parque Independencia.
Después de dos etapas en el Salaíto –y de lograr en el medio dos títulos con Aprendices Casildenses– dio su primer gran salto, tomando las riendas de Juan Aurich de Perú, en 2002. “Siempre supuse que iba a continuar su carrera en otro lado. Me daba la sensación de que no se iba a conformar nunca con ser el mejor entrenador de este ambiente, sino que iba a ir por algo más”, asegura Pablo, y resalta el paso del protagonista de su biografía por los distintos y numerosos clubes del continente. “Acá ya había agotado todo, había hecho una revolución por todas partes, adonde fue ganó y cambió la historia, entonces era algo lógico que pruebe otras experiencias”.
La influencia de Rosario, ciudad futbolera por excelencia, también se refleja en el andar del Zurdo, primero por estos pagos, después por el continente hasta pisar suelo europeo, dirigiendo al Sevilla. “Tenía una gran admiración por Marcelo Bielsa, por eso siempre trataba de ver los entrenamientos, colarse en algún viaje para poder estar cerca de la manera que pudiese, y por supuesto que miraba todos los partidos”, revela el escritor, y añade: “También tenía un vínculo muy importante por haberse formado dirigiendo a Renato Cesarini y Argentino”.
Debut mañanero
Jorge Sampaoli conoció en carne propia el amateurismo futbolero en su máxima expresión. Se inició bien desde abajo, en canchas de tierra y sin pergaminos como jugador, que le hubiesen ahorrado todos los obstáculos para llegar. No se destacó dentro del campo de juego, donde hacía las veces de carrilero hasta que una lesión lo sacó para siempre desde muy pibito.
Para su biógrafo, las estrellas que hoy lo rodean no lo encandilan, y asegura que “la esencia es la misma de toda la vida” con la que se manejó ante futbolistas que debían laburar para ganarse el mango. “En ese sentido no ha cambiado nada, y en cuanto a lo futbolístico siempre ha mantenido el mismo estilo de buscar el arco contrario, de ser vertiginoso por momentos y pausado en otro. Pero lo básico siempre lo mantuvo, que es presionar y buscar el arco rival”, asegura Pablo Paván.
Ya en su nueva etapa dirigiendo a la Selección –que en la mañana del viernes le ganó 1 a 0 a Brasil en su presentación, en el marco de la gira en la que este martes enfrentará a Singapur– el periodista le tiene una fe bárbara. “Lo veo tranquilo, y lo más importante es que está capacitado. Lo ha probado en otra selección (cuando fue DT de Chile, equipo al que sacó campeón de la Copa América 2015), tuvo la posibilidad de ir a Europa y también demostrar ahí. Así que tomando en cuenta esos parámetros, lo veo muy bien y a la vez entusiasmado e ilusionado como toda persona que asume un desafío de tan alto impacto”.
Zurdo y compañero
“Siempre ha expresado un pensamiento de centro izquierda”, lo define Paván sin dar muchas vueltas, como lo hace Sampaoli cada vez que le preguntan de política. “Sí,soy kirchenrista”, admitió en su momento el DT cuando aún vestía el buzo de la Roja. La principal emisora del Grupo Clarín, Radio Mitre, no se lo perdonó e intentó desprestigiarlo. Pero el hombre, fanático de Callejeros y del Indio Solari –y que hasta utilizó discursos de Perón y Evita para entrarle emocionalmente a sus dirigidos– no escuchó, y la siguió en España, mostrándose cercano a las ideas de Podemos, el partido de izquierda liderado por Pablo Iglesias. “Me vinculo con la gente, con quien lo necesita», le respondió a la prensa sevillana.
“En eso siempre ha dejado en claro cuáles son sus convicciones. Siente mucho las cosas desde lo social, no le pasan por el costado. Siempre fue así”, afirma el entrevistado, que en su libro cuenta una anécdota de la época de la última dictadura cívico militar, en la que un adolescente Jorge Sampaoli cumplía una misión en el taller de su tío, que consistía en alertar “si venía alguien a comprar mientras ellos se reunían. Cantaban la marcha peronista. Si pasaba un (Ford) Falcón verde –el auto preferido de los militares para secuestrar gente durante la dictadura cívico-militar en la Argentina– , yo tocaba un botón, para que ellos supieran”.
Sampaoli tiene quien le escriba
“Lo elegí porque tenía la historia muy a mano, me parecía fascinante lo que le había pasado”, argumenta Pablo Paván sobre la decisión de escribir la biografía No escucho y sigo, publicada en 2015, en la previa a la Copa América disputada en el país trasandino. “Además, él se sentía muy cómodo con ser yo quien la escriba, por la cuestión lógica de que iba a relatar fielmente eso que había vivido”, confiesa su ex vecino, y añade: “Me parecía una historia muy potente. Y todo se dio como para que podamos, prácticamente, hacer juntos la biografía”.
De todas maneras, el periodista de Radio 2 e ESPN abre nuevamente el libro para empezar a redactar las primeras líneas del Sampaoli DT de la Selección: “La idea es actualizar la biografía e ir perfeccionándola, y trabajar para estar al mismo paso de un hombre que va muy rápido”.
Por último, Paván resalta la relación que aún mantiene con el Pelado, a pesar de la distancia: “La última vez que nos vimos fue antes de que viaje a Australia para la gira. Trato de no molestarlo mucho pero a veces él tiene inquietudes, así que llama y nos comunicamos. La relación es la de siempre porque a pesar de que han pasado los años, la seguimos manteniendo”.
Fuente: El Eslabón.
