Pueblo, gobierno y fuerzas armadas de Venezuela se mostraron unidas ante una posible agresión armada del Imperio, que viene atentado contra la democracia desde que comenzó la Revolución encabezada por Chávez. De hecho, la injerencia yanqui con violencia armada incluida ya está en marcha, pero oculta.
Toda la falaz propaganda de la derecha internacional contra la Revolución Bolivariana se basa en ocultar un hecho evidente: la injerencia de EEUU en Venezuela. El imperio viene socavando la democracia, las instituciones y la Constitución de la República Bolivariana desde que Hugo Chávez comenzó el proceso que cambió la historia de ese país. Una parte de la denominada “oposición” al gobierno de Nicolás Maduro está financiada por la CIA y responde a los intereses y la estrategia imperial, que incluye guerra económica, guerra psicológica, y actos de terrorismo con violencia extrema en las calles.
El presidente de EEUU, Donald Trump, hizo explícito lo que se hallaba implícito, oculto, larvado: EEUU está dispuesto a dar un paso más en su injerencia, y así pasar a una fase distinta de la agresión militar. Porque, de hecho, la agresión militar ya está en marcha, porque EEUU ya financia y entrena los grupos de terroristas, paramilitares, sicarios y francotiradores que asesinan ciudadanas y ciudadanos en las calles de Venezuela. La amenaza de Trump tiene que ver con hacer pública una agresión más abierta, masiva y devastadora.
“Tenemos muchas opciones para Venezuela, incluyendo una posible opción militar si es necesario’’, dijo Trump desde su club de golf en Nueva Jersey el viernes 11 de agosto.
“Venezuela es un desastre muy peligroso y una situación muy triste’’, agregó el presidente de EEUU.
“Tenemos tropas en todo el mundo, en lugares muy lejanos, Venezuela no está muy lejos y la gente está sufriendo y se está muriendo’’, señaló el mandatario estadounidense ante un grupo de periodistas.
Washington desconoció la Asamblea Nacional Constituyente impulsada por el presidente Maduro, y también rechazada por la oposición venezolana. Las amenazas de Trump llegaron además un día después de que el presidente de Venezuela ordenara a su canciller, Jorge Arreaza, iniciar gestiones para buscar una “conversación personal” con Trump, ya sea por vía telefónica o bien en el marco de la Asamblea General de la ONU, que se celebrará en septiembre en Nueva York. Evidentemente, la respuesta belicista de Trump está muy lejos del diálogo.
El Tesoro estadounidense aplicó sanciones económicas a Maduro, acusándolo de “dictador’’, e ingresándolo a una reducida lista de líderes sancionados, en la que también están incluidos Bashar al Asad (Siria), Robert Mugabe (Zimbabue) y Kim Jong-un (Corea del Norte).
La contundente respuesta del pueblo bolivariano
El pueblo, el gobierno y las fuerzas armadas de la República Bolivariana de Venezuela se mostraron unidos contra la amenaza militar de EEUU.
Fue una movilización impactante, multitudinaria. Una más, que muestra el enorme apoyo con que cuenta el gobierno de Maduro y que desmiente la falaz propaganda de la derecha que lo tilda de “dictador”.
La gran movilización se suma a la que tuvo lugar durante la votación para la asamblea constituyente el 30 de julio, y a la que se produjo días después, con motivo de la ceremonia de asunción de los integrantes de ese cuerpo.
Asimismo, el apoyo, y la unidad interna de las fuerzas armadas es un factor determinante a la hora de evaluar por qué los golpistas no lograron su objetivo principal, el derrocamiento de Maduro, tras tantos años de presiones e intentos de desestabilizar el gobierno.
“Vamos a derrotar la amenaza militar del imperialismo norteamericano”, aseguró Maduro al señalar que “al pueblo venezolano no lo intimida nadie”.
Durante el acto, calificado como “marcha antiimperialista”, el presidente ordenó a las fuerzas armadas realizar ejercicios militares el 26 y 27 de agosto en distintos puntos del territorio venezolano.
Ante una gran multitud de seguidores en las afueras del palacio de Miraflores, en el centro de Caracas, el mandatario pidió a los venezolanos prepararse “para defender la paz, con los tanques, los aviones, los misiles”.
“Vamos a derrotar la amenaza militar del imperialismo norteamericano”, señaló el mandatario.
“Estamos decididos a enfrentar a los racistas de EEUU”, agregó Maduro, al tiempo que dio detalles de los maniobras militares, que se denominarán “Ejercicio soberanía bolivariana 2017”, y de los que participarán no solo la fuerza armada (que cuenta con unos 365 mil efectivos), sino también los civiles.
“Trump go home, que se escuche hasta Washington”, gritaron al unísono Maduro y los manifestantes.