En la media sanción a la reforma tributaria nacional, Diputados borró el embate contra cooperativas y mutuales. En la legislatura bonaerense, en cambio, avanzaron con la aplicación de Ingresos Brutos al sector solidario.
Finalmente, las voces de la economía social argentina fueron tenidas en cuenta y el proyecto de reforma tributaria aprobado en la Cámara de Diputados de la Nación no incluye la quita de la exención de Ganancias a mutuales y cooperativas. Así, fue contemplado el reclamo del conjunto de las entidades solidarias, que se habían expresado largamente contra la aplicación del impuesto a los servicios de ayuda económica y seguros. En la provincia de Buenos Aires, en cambio, la Legislatura actuó en otro sentido al aprobar una modificación en la normativa vigente que afecta a las cooperativas de trabajo en relación al impuesto a los Ingresos Brutos. El embate fue por iniciativa de la gobernadora María Eugenia Vidal, a quien apodan Heidi, pero con los trabajadores autogestionados acciona como lobo feroz.
En el orden nacional, lo que la economía social celebra es que la media sanción que Diputados dio al proyecto de reforma tributaria excluyó los dos artículos del proyecto original, enviado por el Ejecutivo, que quitaban la exención del impuesto a las Ganancias a los servicios de ayuda económica y seguros que brindan cooperativas y mutuales.
La inclusión de esos artículos en el texto impulsado por el presidente Mauricio Macri había provocado una fuerte reacción de las entidades del sector afectado, que reclamaron por varios medios.
Entre quienes se movieron en ese sentido se contaron los trabajadores de la Federación Asociativa de Diarios y Comunicadores Cooperativos de la República Argentina (Fadiccra), de la que forma parte la cooperativa que produce este periódico. “Celebramos que en Diputados se haya tenido en cuenta nuestro pedido y esperamos que pase lo mismo en el Senado. Vamos a seguir insistiendo con que las cooperativas y mutuales tenemos una naturaleza solidaria, no somos empresas privadas, por eso no corresponde que tributemos como las empresas privadas”, sostuvo Julio Delgado, presidente de Fadiccra y de Copegraf, la cooperativa que produce el diario riojano El Independiente.
“Estamos muy preocupados por la situación que se está viviendo, donde nos vemos afectados por las políticas económicas que se vienen aplicando; y sumar esto sería muy duro”, señaló Delgado.
“Creemos que los bloques oficialistas han tomado nota de nuestro reclamo también teniendo en cuenta el contexto de creciente descontento con estas reformas que están imponiendo. Las movilizaciones contra la reforma previsional, de las que nosotros participamos como trabajadores autogestionados, están marcando que no se puede seguir atacando los derechos laborales y sociales”, remarcó el titular de Fadiccra. Y añadió que “lamentablemente en la provincia de Buenos Aires hay otro panorama, donde la autogestión sigue siendo atacada. Nuestra federación está integrada por cooperativas de muchas provincias, varias de ellas de Buenos Aires; por eso queda un sabor agridulce”, resumió el dirigente riojano.
Gobierno bruto
En la provincia de Buenos Aires, la Legislatura provincial aprobó la ley que impulsó la gobernadora María Eugenia Vidal, que cambia la condición tributaria del acto cooperativo de no sujeto a exento y además establece que las cooperativas de trabajo bonaerenses comenzarán a pagar Ingresos Brutos.
En lo formal, todas las cooperativas pierden su calidad de no sujetas y pasan a ser exentas en lo relativo al impuesto a los Ingresos Brutos. Y las cooperativas de trabajo deberán tributar sobre todo servicio que presten a terceros.
Ante la nueva norma, la Confederación Nacional de Cooperativas de Trabajo (CNCT) se pronunció con dureza: “Es una iniciativa vergonzosa que pone de manifiesto la consonancia con la línea ofensiva contra las cooperativas de trabajo que está llevando adelante el gobierno nacional, que también impulsó la iniciativa de gravarlas con el impuesto a las Ganancias, pasando por alto completamente que son entidades que no tienen ganancias porque devuelven sus excedentes al uso de servicios sociales y sus reservas, que son irrepartibles entre sus asociados, pasan al fisco en caso de disolución”.
Según informó el periódico Ecodías, de Bahía Blanca, el titular de la CNCT, Christian Miño, remarcó que “es una medida más en contra de los trabajadores, trabajadoras y de los sectores populares. Sería mucho más fácil sacarle a los sectores más concentrados porque manejan mucho más recursos, pero esto no es parte del esquema de construcción ni de los intereses que defiende y representa este gobierno. Nosotros estamos en las antípodas del pensamiento neoliberal que tienen, porque todos los días nos levantamos para seguir llevando adelante entidades democráticas y solidarias, esos son nuestros valores”, expresó Miño.
Fuente: El Eslabón.