El presidente Michel Temer concedió amplios poderes a la policía y al ejército para reprimir a camioneros en huelga, a quienes el gobierno federal impuso una multa diaria de 10 mil reales por bloquear las rutas.
Miles de camiones bloquearon las carreteras de 25 estados este jueves, en el cuarto día de la medida de fuerza, que causó desabastecimiento de combustibles y alimentos en las principales capitales de país.
La huelga de camioneros se desencadenó por las fuertes subidas del precio del diésel. La Asociación Brasileña de Camioneros (Abcam) divulgó una nota en la que orienta a los camioneros a retirar todos los bloqueos en carreteras, pero indica que la huelga continúa: “Vale recordar que Abcam continúa sin firmar ningún acuerdo con el Gobierno y mantiene la solicitud de retirada del PIS/Cofins (aumento) sobre el diesel”, dice el texto, firmado por el presidente de la entidad, José da Fonseca Lopes.
El comunicado agregó: “Es lamentable saber que incluso tras tanto retraso, el presidente de la República prefirió amenazar a los camioneros por medio del uso de las fuerzas de seguridad en vez de atender las necesidades de la categoría”.
La Ley y el Orden de Temer
Temer firmó el viernes por la noche el decreto de Garantía de la Ley y el Orden (GLO), que autoriza a las fuerzas armadas a hacer el trabajo de policía para dispersar las manifestaciones de camioneros que bloquean carreteras por todo el país.
El ejército podrá actuar como policía para garantizar la dispersión de los bloqueos a las carreteras hasta el 4 de junio, y está autorizado a arrestar a camioneros y tomar sus camiones si se resisten a la orden.
Según el ministro de Defensa Raul Jungmann, a lo largo de la tarde casi la mitad de los puntos de movilización –419 de un total de 938– según las cuentas del gobierno, se desmovilizaron por cuenta propia.
El ejército, desde el principio de la noche, trabaja desobstruyendo vías, liberando el acceso a refinerías y escoltando con caravanas de camiones de combustible.
La acción de las fuerzas armadas contra los huelguistas es amparada por una medida liminar concedida este viernes por el ministro Alexandre Moraes, del Supremo Tribunal Federal (STF), que determina la reintegración de posesión de todas las carreteras federales del país. La liminar fue solicitada por la Presidencia de la República.
“La utilización abusiva del derecho de huelga, reunión, o libertad de manifestación no resulta razonable cuando resulta en perjuicio de gran magnitud”, argumentó el gobierno en su solicitud.
En el texto, el ministro decidió además que los camioneros que no desocupen las carreteras serán multados en 10 reales mil por día.
Gobierno debilitado
En las negociaciones del jueves, el gobierno se comprometió a suprimir un gravamen sobre el diésel (denominado Cide) y a implantar un sistema de subvenciones para prolongar la reducción de 10 por ciento del precio del diésel en las gasolineras anunciada por Petrobras, inicialmente limitado a quince días. Pero suprimió cualquier mención al Pis/Cofins, que tiene un mayor impacto que el Cide en la composición de precios, ante las reticencias del ministerio de Hacienda.
Las acciones de Petrobras, que participó en el acuerdo, se derrumbaron el miércoles un 14 por ciento en la Bolsa de Sao Paulo, debido a los temores de los inversores de injerencias políticas en la estatal que estuvo en los últimos años en el centro del peor escándalo de corrupción de Brasil. El viernes, las acciones preferenciales de la empresa registraban un alza de 1,44 por ciento y las ordinarias retrocedían 0,13.
Fuentes: Resumen Latinoamericano | Brasil de Fato | El Espectador | Amambay News | HispanTV | Reuters