El gobernador Miguel Lifschitz consideró “razonable” el tarifazo de un 60 por ciento propuesto por Aguas Santafesinas. “En un escenario de dificultades todos tenemos que hacer un pequeño aporte» dijo, además, sobre el incremento impositivo a cerealeras y bancos. Por otra parte descartó la implementación del polémico bono acordado entre Nación y un sector de la CGT.
“Es razonable en término de los costos de la empresa y de la realidad económica del país. Aguas propuso para este año un aumento del 50 por ciento. Nosotros autorizamos sólo un 18 en el primer semestre y un 18 en el segundo. Esto quedó muy atrás de la inflación actual. Se tienen que seguir todos los pasos para convalidar un nuevo aumento. Después vamos a valorar el escenario económico que se plantee en ese momento. Podríamos aceptar ese pedido o morigerarlo”, planteó este juevesjue gobernador de Santa Fe en una extensa entrevista con Guillermo Zysman por LT8, en la que repasó varios temas de la economía provincial y nacional.
Lifschitz también se refirió a la media sanción en Diputados del proyecto que plantea llevar de 0,25 a un uno por ciento la alícuota de Ingresos Brutos a cerealeras y bancos, para aportar a un fondo compensador del transporte que equilibre la quita de subsidios del Gobierno Nacional. “Todo lo que sirva para sumar recursos en esta coyuntura económica es positivo”, dijo el mandatario. Y añadió: “Si bien se puede decir que se está gravando a una actividad importante para la provincia, en particular la agroexportadora, pero creemos que en un escenario de dificultades todos tenemos que hacer un pequeño aporte».
Para Lifschitz se trataría de “un fondo transitorio, no permanente”. “Será por este año o al año próximo. Pero esto tampoco resuelve el problema. Estamos hablando de un subsidio de 300 y 500 millones de pesos al año, contra casi cinco mil millones que vamos a perder desde enero. Es simplemente un pequeño paliativo que podría colaborar a mejorar la situación”, apuntó, para luego recordar que “uno de los motivos por los cuales no firmamos el (segundo) consenso fiscal con el gobierno nacional fue que no estamos de acuerdo con la quita de subsidios al transporte urbano e interurbano”.
Consultado sobre el bono que acordaron el gobierno nacional y un sector de la CGT –y que fue repudiado por numerosos espacios sindicales por «insuficiente» y como «una medida para evitar un paro»–, el gobernador señaló que se trató de “un anuncio bastante irresponsable del gobierno nacional”. “No está claro a quien le corresponde. Los empresarios ya plantearon sus imposibilidades de abonarlo”.
“En principio no se aplica al sector público. Y muchos menos en Santa Fe, donde tenemos cláusula gatillo. Los trabajadores reciben todos los meses una actualización de acuerdo al índice de inflación como parte del sueldo”, dijo además Lifschitz sobre el polémico bono.
