Según afirman medios españoles, River y Boca jugarán la final pendiente en el Santiago Bernabéu, el emblemático estadio del Real Madrid. Sería el domingo 9, a las 16.30 de Argentina, aunque aún falta la confirmación oficial.
Después de las tantas sedes que se mencionaron como posibles para albergar la Superfinal, la casa del Merengue rompió contra todos los pronósticos, y se quedará con el clásico que no pudo ser organizado en el país por falta de garantías en la seguridad.
La decisión sería comunicada oficialmente en las próximas horas por las autoridades de la Confederación Sudamericana de Fútbol (Conmebol), que todavía debe presentar la decisión del Tribunal de Disciplina, tras la presentación de Boca en la que reclama sanciones a River (por las agresiones al colectivo que trasladaba al plantel Xeneize el pasado sábado) y ser proclamado campeón.
La opción de la Casa Blanca la aportó la FIFA, y obtuvo el visto bueno de la federación española y de la UEFA, para que la revancha del superclásico se juegue el domingo 9 de diciembre, a las 20.30 hora local, 16.30 de Argentina. En el olvido quedaron las chances de Asunción, Doha, Medellín y Miami.