A solo un mes de gestión los medios opositores ya piden resultados al nuevo presidente en los problemas estructurales que mejor fogonean para sus propios intereses: los homicidios récords y la corrupción. Pero AMLO esquivó los primeros piedrazos y tomó la agenda por las astas.
A apenas un mes de asumido, el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador (AMLO) tuvo que salir al ruedo ofensivo ante la presión descarada de la prensa opositora que ya publicó en primera plana, que en estos primeros 30 días de su gestión aumentaron los homicidios en el país. Pero el flamante mandatario está decidido a batallar contra este agujero negro: insistió en su proyecto de constituir una nueva Guardia Nacional e invitar a los jóvenes a alistarse, y se dio “cien días” para comenzar a torcer la historia. En el otro gran tema de la agenda pública y que manipulan a su antojo los grandes medios hegemónicos, el de la corrupción, tampoco se amilanó: avanzó con la publicación de sus bienes para que lo hagan todos los funcionarios públicos y sus parientes.
AMLO prometió en una conferencia de prensa el jueves pasado que “en cien días de gobierno” va a mejorar y garantizar el tema de seguridad, y en especial la metodología para medir las cifras de la violencia. Desglosó tremendos datos sobre los crímenes en aumento pero que difieren bastante de los que publicó la prensa opositora, en base a datos no oficiales, y reiteró que en promedio se cometen alrededor de 2 mil homicidios al mes.
“Al año, 22 mil, 24 mil, hasta 26 mil homicidios. Esto ha llevado a que de la época de (Felipe) Calderón (2002-2012) a la fecha, hayan perdido la vida alrededor de 240 mil mexicanos”, indicó el mandatario mexicano.
Al cuestionar el reporte de homicidios publicado por el periódico Reforma insistió que no se pueden hacer interpretaciones de los homicidios, pues sólo existen de tipo doloso y culposo.
“No quiere decir, lo aclaro, que no hay problemas. Tenemos problemas de inseguridad y violencia, eso es público y notorio. No se puede tapar el sol con un dedo, pero si dejamos pasar una mentira de esas dimensiones no vamos a garantizar el derecho a la información y va a reinar la manipulación. Y entonces, ¿dónde queda la verdad? Pero, ¿dónde queda la honestidad?, ¿por qué vamos a dejar pasar algo que no obedece a la realidad? Vamos a estar informando mes con mes con datos oficiales para aclarar este asunto. Se va a transparentar todo diario”, se comprometió AMLO.
El diario Reforma había publicado el miércoles pasado en su tapa, un artículo donde señalaba que, de acuerdo con su propio recuento, las ejecuciones crecieron un 65 por ciento en el primer mes de mandato de López Obrador respecto al último mes de noviembre, y que diciembre cerró con al menos 887 ejecuciones u homicidios violentos, un repunte si se lo compara con las 537 víctimas del último mes de gestión de Enrique Peña Nieto.
En la conferencia de prensa, el secretario de Seguridad y Protección Ciudadana, Alfonso Durazo, denunció que el diario falló en su metodología y carece de credibilidad, e invitó a ese medio a compartirla.
Reclutamiento a nueva Guardia
AMLO justificó la convocatoria para reclutar a 50 mil jóvenes para que formen parte de la Guardia Nacional y aseguró que respetará la decisión que tomen los legisladores en cuanto a la reforma constitucional para crear a este cuerpo de seguridad. “Queremos que se resuelva lo más pronto posible lo de la reforma a la Constitución. Hay un periodo extraordinario convocado con ese propósito para mediados de este mes. Yo creo que los legisladores van a apoyar esta iniciativa, pero no queremos perder tiempo, queremos avanzar en todo lo que podamos”, dijo.
El gobierno anticipó que en 2019 buscará reclutar a 21.170 personas para el nuevo cuerpo de seguridad y que el resto se integrará en los siguientes dos años. Ya se han instalado doce centros de reclutamiento, principalmente en el centro y sur del país, donde esperan recibir a jóvenes de entre 18 y 30 años.
Otro mal estructural
AMLO también puso en primer plano su principal tema de campaña, la lucha contra la corrupción e informó que todos los funcionarios deberán dar a conocer sus bienes, al tiempo que adelantó el viernes su propia declaración al respecto.
“Todo servidor público tiene que dar a conocer sus bienes y transparentarlos. Por cuestiones de índole moral, todos tenemos que dar a conocer los bienes. El que no dé a conocer sus bienes alegando de que la ley no se lo exige no va a poder desempeñarse en este gobierno; transparencia es transparencia”, alegó, y subrayó que también deberán transparentar los bienes de los familiares cercanos a los servidores públicos.
“Lo dije en la toma de protesta, el principal problema de México es la corrupción, no lo olvidemos. Me patea el hígado el saber que organismos internacionales como Transparencia Internacional nos coloca en el sitio 135 de corrupción, como mexicano me indigna, me molesta, no puedo decir otra palabra. Eso se acabó, porque eso no tiene que ver con nuestro pueblo. Nuestro pueblo es honesto, nuestro pueblo tiene buenos sentimientos, nuestro pueblo es trabajador, es ejemplar, y un grupo de ambiciosos han manchado el nombre de México y han afectado la reputación de los mexicanos, esto se acaba. Me canso ganso”, concluyó.
Con los zapatistas, disidencias pero “respeto”
El presidente Andrés Manuel López Obrador aseguró que no le preocupa la oposición anunciada por el Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN) al proyecto del Tren Maya, y reiteró su respeto a ese movimiento insurgente. “No vamos a enfrentarnos a ningún grupo, nosotros queremos la paz y la reconciliación. Puede haber diferencias. Las hay. Pero eso no significa que se vaya a caer en una confrontación o en un pleito”, sostuvo.
“Aunque quieran confrontarnos no va a haber respuesta. Amor y paz (…) Tampoco me van a cucar (asustar). Nadie me va a cucar”, reiteró el presidente, y negó tener algún conflicto con el Subcomandante Galeano, antes Marcos, quien el pasado 31 de diciembre señaló que el trazado ferroviario que impulsa AMLO afectará a los pueblos originarios del sureste del país y que no lo permitirán.
El proyecto de “tren moderno, turístico y cultural” busca comunicar los principales centros arqueológicos de la cultura maya en cinco estados del sureste mexicano, y detonar el desarrollo económico de los principales destinos turísticos regionales como Cancún, Tulum, Calakmul, Palenque y Chichen Itzá. La inversión sería entre US$6.000 y US$8.000 millones y la obra será sometida a escrutinio popular.