En la víspera de la navidad, el recién asumido gobernador Omar Perotti vetó la ley de expropiación del ingenio Las Toscas que había sido aprobada durante noviembre tras un largo periodo de conflicto a partir de la decisión del dueño del establecimiento de suspender las actividades y comenzar el proceso de vaciamiento. Sin demasiadas aclaraciones al respecto, por aquellas horas la noticia solo tuvo repercusión a partir de las declaraciones en repudio de la decisión gubernamental por parte del diputado provincial Carlos Del Frade, quien indicó que con la decisión unas 160 familias perdían su fuente de trabajo.
Atravesado por versiones que aludían a la inviabilidad del emprendimiento productivo y a la posibilidad de una reconversión de la actividad en la región centrándola en la producción de bioenergía y carne, el tema lentamente se diluyó y perdió lugar en la agenda pública. A raíz de esto, un grupo de más de cien trabajadores de la fábrica decidieron comenzar este lunes un corte de la ruta nacional 11 en el ingreso sur a Las Toscas hasta que se brinde una respuesta por parte del gobierno provincial.
En diálogo con los medios que se acercaron al lugar, el secretario general del sindicado azucarero del distrito, Javier Ávalos, explicó que los obreros “están cansados de manoseos, de mentiras, de promesas incumplidas y de la insensibilidad de un gobierno provincial que lo único que hizo hasta el momento fue quitarle las esperanzas a las familias que dependen de la cuenca cañera santafesina”.
Además, los trabajadores denunciaron que en las últimas horas comenzó la demolición de una parte del establecimiento. Por esa razón, solicitan una reunión urgente con ministros provinciales con capacidad de decisión para buscar una solución a la situación que viven las 500 familias que dependen directa e indirectamente del ingenio.
“Continuamos sin entender el motivo de la decisión, porque en ningún momento alguien del gobierno anunció alguna medida alternativa para que no perdamos la fuente laboral. Por el contrario, parece que creyeron que, con la promesa de otorgarnos una ayuda económica de 4000 pesos por tres meses consecutivos, que realmente cumplieron solamente en el mes de enero, todo se iba a solucionar”, indicó a la prensa el dirigente sindical.
Tras el cierre, los empleados no fueron indemnizados por su condición de trabajadores temporarios, dado que realizaban tareas durante el período de zafra, y recibieron un subsidio del plan Nexo Oportunidad.
Desde la entidad gremial aseguran que el 30 de diciembre desde el ministerio de Trabajo, Desarrollo Social y Producción de la Provincia, les aseguraron que para mediados de enero se presentarían en la localidad para dialogar con los trabajadores, los productores y los empresarios, a fin de conseguir un panorama completo de la realidad en la cuenca cañera, elevar una notificación al gobernador y avanzar en resoluciones. Los trabajadores destacaron que la situación dominial de la planta aún se encuentra en litigio y la continuarán defendiendo hasta recuperar las fuentes de trabajo.
Buena voluntad
En las últimas horas los trabajadores del ingenio decidieron levantar el corte de ruta como un gesto de buena voluntad a la espera de que el gobierno provincial les confirme una fecha concreta para comenzar el diálogo. En ese sentido, solicitan que se determine un día y un horario para la presencia de los funcionarios y remarcan su expectativa en torno a lo que pueda expresar el ministro de Trabajo, Roberto Sukerman, durante la reunión que esta tarde tendrá en la comisión de Asuntos Laborales