Diversas organizaciones feministas convocan a hacer ruido –este lunes a las 18, en todo el país– desde balcones, ventanas, terrazas, por al menos siete femicidios cometidos durante al aislamiento obligatorio.
El colectivo Ni Una Menos, MuMala, La Casa del Encuentro y distintas organizaciones de todo el país convocaron para este lunes a las 18 a un ruidazo contra los femicidios y la violencia de género, ya que en los últimos días de aislamiento social por coronavirus, al menos seis hombres mataron a siete mujeres, entre ellas, a dos bebas y a una niña.
Más allá de las cifras y las fechas, la realidad es que los femicidios siguen sucediendo en un contexto de aislamiento social obligatorio que funcionarias de áreas de género y especialistas han calificado de “vulnerabilidad” para las mujeres en situación de violencia, ya que se les hace más difícil pedir ayuda, sobre todo si conviven con el maltratador. Y lo mismo pasa con las y los niños que conviven en hogares con violentos.
🌈Hoy 18 hs
Mujeres, Lesbianas, Trans, Travestis, Bisexuales, No Binaries + , nos sumamos al 🥁📢#Ruidazo📣Basta de Femicidios y ataques de odio#EmergenciaNiUnaMenos#AlertaFeminista pic.twitter.com/JcAlz6ZMg6
— MuMaLá Nacional (@MuMaLaNacional) March 30, 2020
Ante esta situación, las organizaciones feministas invitaron a hacer ruido desde balcones, terrazas, ventanas, repudiando estos crímenes. El aislamiento en Argentina comenzó el 19 de marzo, y el 21 en la ciudad bonaerense de Bahía Blanca encontraron el cuerpo de Susana Melo, femicidio por el cual está detenido Gregorio Costa.
Ese mismo día, en Puerto Libertad, Misiones, era asesinada Lorena Barreto, y por el femicidio está imputado Roberto Rivero Medina, pareja de la mujer.
El 26, una beba de dos meses murió luego que le disparara Mario D. S., de 40 años, pareja de la mamá de la niña.
El sábado pasado encontraron el cadáver de Claudia Repetto, desaparecida el 1 de marzo en Mar del Plata. Ricardo Rodríguez confesó ante la Justicia que es el asesino.
También el 28 de marzo identificaron el cuerpo de Cristina Iglesias, enterrado en su casa de Monte Chingolo, en el conurbano bonaerense, junto a su hija de 7 años, y por el doble femicidio está imputado Abel Romero, quien este lunes confesó ser el autor.
Y ese mismo día, en Lules, Tucumán, la policía encontró el cuerpo de una niña de dos años, asesinada por su padre, Leonardo Almirón que se suicidó luego de matarla.
#PANDEMIAdeGénero#30M– 18hs- #RUIDAZO
21/3 Susana Melo Bs As
21/3 Lorena Barreto Misiones
24/3 Verónica Soule Santa Fe
26/3 niña- Misiones
28/3 Claudia Repetto Bs As
28/3 niña-Tucumán
28/3 Cristina Iglesias y su hijita Bs Ashttps://t.co/13fc5PCDuO— La Casa del Encuentro (@Casadelencuentr) March 30, 2020
La protesta también es convocada por La Revuelta de Neuquén, con la consigna: “Que la rabia contra los femicidios y la violencia machista se vuelva ruido colectivo”, y por la Colectiva Ni Una Menos de Santiago del Estero que eligió la afirmación “El machismo no se toma cuarentena”, e invitó a que las personas se saquen fotos con el flyer y compartan en redes sociales.
También Socorristas en Red de Viedma, Río Negro y las colectivas Ni Una Menos Santa Fe, Jujuy, Rosario y Córdoba llamaron a hacer ruido.
La Organización Mundial de la Salud definió a la violencia de género como una pandemia, que estos tiempos, convive con la pandemia de coronavirus, aislando a las víctimas, por eso, desde distintos poderes judiciales provinciales se prorrogaron automáticamente las medidas de protección para quienes tienen causas iniciadas.
Además, los ministerios de las Mujeres nacional y bonaerense están intensificando los recursos. Este lunes, el Ministerio de las Mujeres, Políticas de Géneros y Diversidad Sexual de Buenos Aires informó que el gobernador Axel Kicillof autorizó a ese organismo a otorgar subsidios para atender contingencias de carácter humanitario de extrema gravedad y urgencia así como para gastos para las víctimas de violencia de género y sus familiares en medio del aislamiento social preventivo obligatorio.
Y el ministerio nacional recordó que en el país se encuentran habilitados las 24 horas las siguientes opciones de comunicación para situaciones de violencia de género: teléfono 144, mail linea 144@mingeneros.gob.ar y por WhatsApp a los números (+54) 1127716463 / (+54) 1127759047 / (+54) 1127759048.
El 28 de marzo, la militante feminista Cecilia Solá, escribió sus sensaciones de los días transcurridos.
Hace trece días que estamos en aislamiento social obligatorio.
Han muerto 19 personas de Corona Virus, y se estiman 500 infectados.
Las medidas se han endurecido. Es necesario un permiso específico para circular, caso contrario, podemos ser detenidos y encarcelados.
Gran parte de la sociedad aplaude la masiva presencia de las fuerzas de seguridad en las calles, y justifica los abusos de autoridad como daños colaterales.
El «algo habrán hecho» muta a «y para qué andaba en la calle», y asoma su feo rostro de complicidad civil.
Vecinos denuncian a vecinos, porque lo escucharon toser.
Personas controlan desde el balcón cuantas cuadras llevan al perro a hacer caca.
En las redes se reproducen escenas de extrema violencia policial contra pibes de barrios, y los comentarios son aterradores.
De repente, somos todos guardianes de los y las demás.
Aún así, han muerto nueve mujeres durante la cuarentena. Asesinadas por hombres de su entorno cercano, la mayoría parejas o ex parejas.
Según los datos del Observatorio de Género Ahora que Sí Nos Ven, el 60% de los femicidios del 2020 se produjeron en las casas de las víctimas.
Todas ellas tenían vecinos y vecinas que no vieron nada. No escucharon. No sabían.
¿Qué miramos, entonces?
La cuarentena obligatoria trae aparejado un enorme silencio.
Silencio en los medios, ajenos a todo lo que no esté directa o indirectamente, relacionado con el COVID-19.
Silencio en las comisarías, abocadas a detener a quienes rompan la cuarentena, más que a quienes rompen mujeres.
Y silencio en la ciudad.
En el barrio.
En el edificio.
En la Unidad Funcional.
Todo se escucha con más nitidez.
La decisión es que hacer con lo que podamos llegar a escuchar en este callado encierro obligatorio .
Levantar el volumen o levantar el teléfono ante el grito de la casa de enfrente, los golpes en el piso de arriba, las cosas que se rompen, medianera de por medio.
Porque ya no podremos decir que no escuchamos.
Llamá.
Al 911
Al 144
Al 137
A la comisaría más cercana.
Avisá de lo que pasa en el grupo de los vecinos, pediles que llamen ellos también.
Porque si vamos a poner el ojo vigilante sobre los y las demás, mejor que sea para ayudar.
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Juan Carlos Gómez
30/03/2020 en 17:57
¿Cual es la idea? ¿Los maltratadores y femicidas van a escuchar el ruidazo, se van a conmover y van a desistir de sus acciones? Me sacan de quicio aquellos que hacen bardo al pedo para esquivar la verdadera solución. Si quieren hacer algo útil, lleven este proyecto a sus legisladores amigos. https://www.facebook.com/notes/hugo-lopez/reforma-legislativa-para-combatir-la-violencia-de-g%C3%A9nero-en-forma-efectiva/10212080876487856/