Titulares de albergues transitorios de la ciudad y la región insistieron en que el gobierno provincial los incluya en las actividades exceptuadas de la cuarentena. “Nos vamos a la quiebra”, advierten desde la Cámara que nuclea al sector, y acusan: “Los hoteles de pasajeros están trabajando cómo moteles”.

La Cámara de Alojamientos y Afines del Litoral volvió a reclamar la inclusión entre los rubros que volvieron a funcionar en el marco de la fase cuatro de la cuarentena. “Cumplimos con las normas de higiene y seguridad mucho antes de la actual pandemia”, aclararon desde la entidad, y repudiaron: “Ahora tenemos con una noticia que nos perjudica aún más: los hoteles de pasajeros están trabajando cómo moteles”.

Desde el sector –que acumula 60 días con las puertas cerradas– avisaron que “ya hicimos presentaciones de nuestro protocolo de trabajo ante los organismos correspondientes (Ministerio de Trabajo, Provincia y Ministerio de la Producción)”, pero lamentaron que “todavía no hemos recibido ninguna respuesta de parte de las autoridades”.

“Somos aproximadamente 30 establecimientos con 300 empleados directos y otros tantos indirectos. Ya están autorizados para trabajar galerías, peluquerías, negocios. Nosotros no generamos gran movimiento de personas que es lo que las autoridades argumentan al momento de decir que no nos habilitan”, indicaron en un comunicado.

En este sentido, la Cámara se preguntó si “los negocios del centro de Rosario, los negocios de pago de impuestos y servicios, los bancos, supermercados y ahora los hoteles trabajando como moteles, ¿no generan un mayor movimiento de personas?”. 

“Nos sentimos discriminados, y con el «problema» que las personas siguen teniendo sexo en los lugares más insólitos. Nos vamos a la quiebra con más de 60 años de antigüedad cada uno de nuestros establecimientos”, alertaron, y concluyeron: “Necesitamos que los políticos no teman la necesidad humana y sanitaria de la población que se expone en estos tiempos. Sino seguiremos como el triste recuerdo de un prejuicio de las instituciones gubernamentales”.

La entidad le envió el pasado viernes una carta al gobernador Omar Perotti, con el objetivo de ponerlo en conocimiento de la crisis que atraviesa el sector en el marco de la pandemia. En la misiva reflejan las dificultades de seguridad –ya que la mayoría de los establecimientos se encuentran en zonas alejadas del centro– y el impacto económico que les generó el aislamiento.

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