Norma López, quien se postula para la Cámara baja provincial por el espacio que lleva a Busatto como gobernador y a Sukerman como intendente, asegura: “Somos los únicos que tenemos propuestas concretas acerca de qué vamos a hacer y cómo lo vamos a hacer”.
Norma Beatriz López nació un 25 de marzo en Rosario. Estudió Comunicación Social en la Universidad Nacional de Rosario y trabajó en diversos medios de la ciudad tanto en gráfica como en radio y televisión. Es madre de Juan Ignacio y María Luz. Desde 2009 es concejala de manera ininterrumpida. Pero si tiene que definirse, elige una sola palabra: militante.
López, que encabeza la lista de precandidatas y precandidatos a diputados provinciales de Unamos Fuerzas, espacio que competirá dentro del frente Juntos Avancemos en las Paso del próximo domingo 16 de julio, y que lleva a Leandro Busatto como precandidato a gobernador y a Roberto Sukerman como intendente, se prestó al diálogo con El Eslabón.
—¿En qué momento te encuentra esta nueva campaña?
—En un momento en el que para hablar de política hay que tener compromiso y espalda para resistir archivos porque en un momento la política se alejó de la agenda de la gente y la gente está desanimada y desesperanzada. Entonces, tenemos que recuperar la mirada acerca de para qué hacemos política y dónde está la agenda del pueblo, y sobre todo en el peronismo. El peronismo que nació como un movimiento nacional, popular, democrático y feminista, como dice Cristina, pero que además interpela lo que es el status quo. En algún momento esa necesidad de interpelación, ya sea por la pandemia, por la situación económica, nos alejó de una agenda que debería ser mucho más cercana a las necesidades de nuestro pueblo que son las y los laburantes. Estas elecciones nos encuentran en un momento en el que el debate al interior del peronismo y del kirchnerismo, o sea del movimiento nacional y popular, tiene que fortalecerse. Tenemos que estar muy atentos porque después de las Paso, lo que tenemos enfrente para las elecciones generales es un espacio político de una derecha mucho más organizada y violenta que la que conocíamos. El gobierno de Macri fue una derecha que tuvo acciones violentas pero en parte jugaba a ser una socialdemocracia, que no lo era en el fondo, pero ahora realmente sabemos qué es lo que está en juego. Y tener presentes las diferencias de cómo juega lo nacional y lo provincial, porque está claro que nacionalmente hay conducción y en la provincia de Santa Fe es justamente lo que está faltando.
—¿Qué se necesita para revertir ese desánimo de la gente para con la dirigencia política?
—Más y mejor peronismo. Mejorar las gestiones, tanto la nacional como la provincial, reeditar la posibilidad de volver a construir sueños, de volver a construir la voluntad acerca de cómo se avanza por la justicia social. Estoy convencida de que estamos ante una gran oportunidad en ese sentido. En la previa de las Paso la ciudadanía se acerca un poco más, hay barriadas donde toman la propuesta y la discuten, mucha gente que se acerca y nos dice «me parece que se equivocaron en tal o cual cosa». Necesitamos más construcción colectiva, dejar de lado tantos egos y empezar por otro camino. Nuestra provincia ha tenido muchos egos en juego y creo que tenemos que hacer una autocrítica y ponernos de acuerdo en definir puntos de acumulación entre todas y todos. Está claro además que la política ha cometido errores como no escuchar a la gente y creer que las decisiones se toman a nivel dirigencial y sin participación social. Y creo que desde todas las gestiones se generaron esas situaciones. La municipal es una de ellas: no escucha, no se sienta a dialogar. Y también está el tema de la Justicia que también tiene un rol muy importante, primero en lo que significa acceder a la Justicia para los trabajadores y segundo el rol de la Justicia porque yo no encontré ni un fiscal ni un juez en todo el país que investigara por qué las corporaciones te fijan los precios de la canasta básica alimenticia. Porque más allá de todos los programas que hay a nivel nacional, provincial y municipal, hay una decisión concreta de las corporaciones alimenticias que además son las que garantizan los agro negocios y que fijan las condiciones de la distribución de los alimentos. Eso también es soberanía y la Justicia muchas de las cosas que puede hacer no las hace. Una Justicia que no investigó cómo se debe el intento de asesinato de Cristina, que para nosotros no es menor. Creo profundamente en la mirada estratégica de Cristina, que por supuesto puede cometer errores pero es la que logra conducir y conducirnos a todos y todas. La posibilidad de una fórmula amplia y cómo la fue generando, porque tuvo un rol imprescindible para que hoy tengamos a Massa y a Rossi, es una construcción que tiene su base en la amplitud.
—Sos concejala de la ciudad hace años pero ahora vas por un cargo provincial, ¿cómo ves a Santa Fe?
—Es una provincia que históricamente ha sido rica y vivimos hablando de producción, pero si a ese modelo de producción no le incorporamos la mirada de la redistribución de la riqueza, no vamos a hacer justicia social. No podemos permitir que en una provincia que recauda y que exporta, sigamos hablando de pobreza y no de cómo los niveles de concentración económica son los que menos participan de la vida cotidiana del ciudadano que necesita un aporte del Estado. Con Bussatto y Sukerman tenemos una propuesta que es la creación de un Ministerio de Deporte que tiene que ver con el acceso a los derechos y en cómo generar mejores condiciones de vida a través del deporte, la cultura, el trabajo y la educación. Estamos dispuestos a lograr que los sectores más concentrados de la economía empiecen a pagar de una vez por todas. No puede ser que cualquiera que quiera poner un quiosco tenga que pagar ingresos brutos y las diez cerealeras más grandes de la provincia estén exentas. No podemos seguir permitiendo estas diferencias sociales porque las bases de las diferencias, constituyen también la violencia que hay en nuestra sociedad.
Gravando en un 1 por ciento a esas cerealeras vamos a poder volcar ese monto, que ronda los 7 mil millones de pesos, en el deporte. Así vamos a poder darle agua caliente a todos los clubes donde asisten los pibes y darles una merienda. A eso le vamos a sumar el Boleto Deportivo Gratuito que complementa al Boleto Educativo Gratuito, que fue un gran acierto del gobernador, y con eso garantizamos que se puedan formar en alguna disciplina y también la sostenibilidad de los clubes. Y si gravamos con el 1,5 por ciento al volumen de exportaciones e importaciones en la provincia, vamos a solucionar el problema edilicio en las escuelas que muchas veces en lugar de ser sitios amigables para alumnos y alumnas terminan siendo un lugar desangelado. Necesitamos una ley de Educación y pienso trabajar en eso como lo hemos trabajado acá en Rosario con la creación de los jardines materno parentales, una ordenanza que fue votada hace mucho y que el socialismo nunca puso en práctica. Por eso decimos que para poder sostener políticas de inclusión, la plata la tienen que poner los que más tienen.
—¿Por qué Busatto?
—Leandro es un compañero militante con el que venimos construyendo hace mucho tiempo. Hace casi una década atrás, hicimos la experiencia de la Lista Joven de diputados y diputadas de la provincia, que justamente encabezaba Kiko y que realmente se formó en lo que significa no solamente el peronismo sino en la mirada del kirchnerismo. Que un compañero con las condiciones que él tiene, con la capacitación que ha tenido con la mirada puesta en el rol del Estado, pueda hoy conducir un desafío, un recambio generacional y una propuesta política en la que podemos decir que no hemos venido a la política para hacer negocios sino que estamos para revertir lo que significa el status quo contra la gente, es un orgullo. Estoy convencida de que Busatto tiene un rol muy importante en la política santafesina, no solamente en nuestro presente sino en el futuro. Conoce la provincia porque la ha recorrido muchísimas veces y no duda a la hora de saber quiénes son los sectores con los cuales hay que tener tensión: con los sectores más concentrados y nunca con los laburantes. Porque eso es lo que ha pasado en esta etapa del peronismo en la Provincia, que se han invertido esas tensiones.
—¿Por qué Sukerman?
—Hace cuatro años estuvimos muy cerca de llegar a la intendencia con la figura de Roberto y creo que este es el momento porque además la gestión de Javkin no ha sido buena, hay un deterioro muy grande de lo que significan las políticas públicas y el diálogo con la vecina y el vecino. Rosario está bastante olvidada de las políticas públicas y hay una incapacidad en la conducción desde el punto de vista de que cada una de las cuestiones que se tienen que resolver en Rosario, la gestión de Javkin tiene la virtud de tirarle la responsabilidad a Nación. Sukerman tiene diálogo con muchísimos sectores de la sociedad y también de los que conforman la vida política, económica y financiera de Rosario. Ha sido formado en la instancia del sector de Ansés, que ha liderado la Asignación Universal por Hijo entre muchas otras conquistas y en la ampliación de derechos. Sabe lo que significa el trabajo en el territorio y con la ciudadanía, y tiene muchísima experiencia en gestión tanto en la provincia como en la nación.
Estamos muy entusiasmados con la posibilidad de que el ciudadano nos dé la oportunidad de gobernar Rosario y la provincia. En la ciudad, el peronismo hace 50 años que no ha accedido a gobernarla y desde la vuelta de la democracia la han gobernado los partidos que hoy están en Unidos por el Cambio y el PRO: el radicalismo y el socialismo. Roberto va a redefinir el perfil de seguridad para la ciudad y lo va a hacer con las instituciones y organizaciones en todos los barrios. Lo va a hacer tratando de liderar lo que significa la fuerza policial y con un trabajo constante de gestión. Sukerman tiene una serie de atributos que pueden generar que la vecina y el vecino voten por una transformación de la ciudad en tiempo real.
—¿Por qué los rosarinos y rosarinas deberían votar la lista de Unamos Fuerzas?
—Yo creo que la nuestra es la mejor de las propuestas. Primero, porque realmente somos los únicos que estamos debatiendo propuestas desde antes del cronograma electoral y que tienen los ejes en seguridad, salud, educación, acceso a la vivienda, ambientalismo, producción y empleo. Somos los únicos que tenemos propuestas concretas acerca de qué vamos a hacer y cómo lo vamos a hacer. Pero además con la defensa de intereses muy claras: yo no voy a la Cámara baja a defender los intereses de las corporaciones y a defender los intereses de los jueces y las juezas. Si el voto me lleva a la Cámara baja voy a defender los intereses de los trabajadores y las trabajadoras en lo que significa una grandísima diferencia con las propuestas de Cambiemos. Ellos son todos mano dura. Losada no vive en nuestra provincia y cuando viene lo hace en un avión que vaya uno a saber quién lo paga y con un chaleco anti balas. No hay una mirada acerca de cómo acompañar a los vecinos y vecinas que son los que constantemente la pelean. No hay una mirada sobre las mujeres que están en los comedores y que son las que defienden a nuestros jóvenes para que no se los chupen las mafias y las bandas narcos.
Entonces claramente nuestra propuesta política no está en la arena política para hacer negocios. Resistir archivos también nos da la posibilidad de decir por dónde vamos a caminar. Y en ese sentido, el hecho de no tener miedo o temor al diálogo con sectores que piensan distinto hacen que nuestra propuesta pueda ser debatible, analizable y también para pedirles que nos acompañen con el voto.
Nota publicada en la edición impresa del semanario El Eslabón del 08/07/23
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