De acuerdo con su reciente discurso en la Legislatura, el gobernador santafesino está muchísimo más preocupado por garantizar un techo a “los delincuentes” que a quienes no delinquen.
Tal afirmación puede fundamentarse al cotejar lo dicho en uno y otro sentido en su mensaje del 1º de mayo pasado en la sede legislativa provincial. Por un lado, tras remarcar que “sin lugar a dudas, es imperioso mejorar nuestro sistema penitenciario”, Maximiliano Pullaro anunció que “en total, tenemos proyectado sumar 2459 celdas, para 3632 reclusos, con una inversión pública de 227 millones de dólares”. Por el otro, énfasis cero y cero sobre proyectos a futuro también. “Se crearon nuevos programas destinados al acceso del suelo urbanizado y acceso a materiales para viviendas por primera vez con fondos enteramente provinciales”, fue la única mención.
Así que una de dos: o el gobernador no tiene prevista inversión alguna en al menos paliar el déficit habitacional de la población de la provincia, o sí tiene planes de destinar fondos a la construcción de viviendas pero no le pareció importante anunciarlos en su primer mensaje anual de apertura de las sesiones legislativas, uno de los discursos más trascendentes que le toca brindar a un mandatario provincial durante su gestión.
En favor de esta segunda hipótesis vale señalar que menos de un mes antes, el 12 de abril, el titular del Ejecutivo participó de la licitación de la construcción de 64 viviendas en el barrio La Tablada de Rosario, tareas que cuentan con un presupuesto oficial de casi 3.500 millones de pesos. En esa ocasión, brindó otro dato que tampoco mencionó este 1º de mayo pasado: “cuando hay un recorte de la obra pública en todos lados, nosotros vamos a invertir este año alrededor de 450 millones de dólares”, aseguró.
“Obras Públicas”, claro, no es sólo construcción de viviendas. En el discurso ante la Legislatura hubo alusiones a otras aristas a las que dedicó más tiempo y adjetivaciones, aunque la falta de precisiones en torno a montos a invertir y tareas a realizar fue el denominador común. A menos que se incluya en el capítulo “obras públicas” anuncios con un poco más de precisiones que el gobernador enmarcó bajo otros ejes de su gestión, como por ejemplo el de los 13 mil millones de pesos que, en línea con sus políticas de “desarrollo productivo”, prometió destinar a ejecución de caminos y obras de electrificación para “nuestros campos”, según especificó.
Otros de los pocos anuncios que incluyeron data sobre fondos a gastar fueron los “más de 2.000 millones de pesos para reactivar y concluir la nueva Planta Unificada de Sólidos Betalactámicos y Ácido Clavulánico” del Laboratorio Industrial Farmacéutico (LIF) y los “64.900 millones de pesos en obras” para la Empresa Provincial de la Energía (EPE). En ambos casos, se puede suponer que los montos provendrán de cajas distintas a la de los 450 millones de dólares para “obras públicas”, de la que sí es probable que salgan los prometidos para “nuestros campos”.
En cuanto a los 227 millones de dólares para la construcción de celdas, Pullaro los consignó al explayarse sobre sus políticas de seguridad y tras remarcar lo “imperioso” de “mejorar nuestro sistema penitenciario”, que requiere “en primer término, retomar el ritmo de construcción de obra pública penitenciaria y adecuarla a la realidad que vivimos”.
Si la “obra pública penitenciaria” es parte o no de “obras públicas” en general no fue aclarado en el mensaje a la Legislatura. Sea como sea, con la realidad que vivimos y todo, suena a enorme desproporción invertir en celdas más de la mitad de lo que –de acuerdo con lo informado el 12 de abril– se destinará a “la obra pública”, que “será uno de los pilares de los lineamientos políticos de la gestión”, según remarcó el gobernador ya el miércoles pasado en la sede legislativa, para luego avanzar sobre lo planificado en ese sentido con algunas puntualizaciones. En lo que hace a infraestructura vial “activamos siete frentes de reparación de rutas que se hallan en pésimo estado» y “trabajamos en 27 proyectos de nuevas rutas, pavimentaciones y puentes para licitar en este año a lo largo de todo el territorio”, señaló. “En recursos hídricos se convocaron a los Comité de Cuencas en los primeros días” y “se reactivaron 98 convenios con Municipios y Comunas”, añadió. “Ya hicimos 8 llamados a Licitación, para obras de arquitectura de distintas escalas; y están en desarrollo otros 62 proyectos”, dijo después, y a renglón seguido fue lo de los “nuevos programas destinados al acceso del suelo urbanizado y acceso a materiales para viviendas”. Finalmente, sumó que ”con más de 100 intervenciones, estamos desarrollando los proyectos ejecutivos en aquellas localidades que no cuentan con redes de agua potable o cloacales o que se encuentran en un estado muy crítico” y que “están en ejecución y con buen ritmo de avance todas las obras de saneamiento, así como también los sistemas de acueductos y ramales que se encontraban paralizados”.
Que el mandatario provincial no haya brindado el 1º de mayo todas las precisiones y detalles sobre cada tema que abordó y cada anuncio que realizó es entendible. Y es probable que esa información que falta esté disponible en algún lado y pueda desmentir o relativizar la validez de lecturas como la aquí planteada de arranque en torno a la disparidad de inversiones a realizar entre la construcción de celdas y otras obras.
Más datos tal vez ayudarían también a disipar dudas sobre diversas áreas y políticas públicas en particular, pero desde acá se duda si valdrían para responder un interrogante más amplio: ¿Cómo harán Pullaro y sus funcionarios para cumplir “nuestra tarea” de “gobernar para que los santafesinos y las santafesinas puedan vivir el presente con más tranquilidad y mirar el futuro con esperanza” y al mismo tiempo ajustar gastos e inversiones que reviertan la letalidad que atribuyen al déficit público que afirman haber heredado?
En principio, en su mensaje ante las cámaras legislativas, el titular del Ejecutivo mostró un optimismo envidiable. Incluso, el compromiso que asumió fue más allá de lo de garantizar “más tranquilidad” y un “futuro con esperanza”.
“Vamos a hacer de la Invencible Provincia de Santa Fe el tractor de la Argentina y el territorio de lo justo”, redobló.
En cuanto al cómo hacer para lograr tamaña meta, sostuvo que será con “compromiso, carácter, dedicación, responsabilidad, honestidad material e intelectual y mucho diálogo”.
¿Y plata? ¿Será que no hace falta o no importa cuánta haya o no haya porque ahora es con compromiso, carácter, dedicación y todo eso que se come, se cura y se educa?
Más datos a lo Boasso
El secretario de Seguridad Social de la provincia, Jorge Boasso, se sumó al afán por estigmatizar a la docencia a través de una recortada difusión y comparación de datos,sobre accidentología laboral y enfermedades profesionales de Dirección Provincial de Autoseguros de Riesgos de Trabajo (Dipart).
“Cuando asumió el gobernador Maximiliano Pullaro nos encontramos con 193.617 días acumulados de licencias de 870 agentes públicos. Con nuestra gestión al 30 de abril tenemos 74.486 días de 338 agentes”, indicó el ex concejal rosarino, lo que derivó en títulos periodísticos dando cuenta de una “brusca caída” atribuida a mayores controles estatales.
“Había un círculo vicioso por falta de controles que había que romper”, enfatizó Boasso, pese a que no precisó a cuánto tiempo corresponden los días de licencia “acumulados” a noviembre pasado y cotejados con sólo los últimos cuatro meses, entre los cuales se cuentan los períodos de vacaciones de verano en los que, lógicamente, accidentes laborales y enfermedades profesionales son considerablemente menos que en tiempos de plena actividad.
“Teniendo en cuenta que el costo laboral promedio por día en la provincia es de $30.000 el costo total de las licencias era de 5.808 mil millones. Hoy con gestión, 2.234 mil millones” (sic), tiró también Boasso a través de posteos en la red social X.
3. Teniendo en cuenta que el costo laboral promedio por día en la @GobSantaFe es de $30.000 el costo total de las licencias (ver tuit 2) era de 5.808 mil millones. Hoy con gestión 2.234 mil millones @maxipullaro
— Jorge Rosario Boasso (@jrboasso) May 13, 2024
Nota publicada en la edición impresa del semanario El Eslabón del 18/05/24
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