Una denuncia por ruidos molestos le ahogó la fiesta del sábado 21 por la noche, madrugada del domingo, al Club Atlético Estrella Azul, que estuvo clausurado por tres días. “Clausurar un club es clausurar un pulmón comunitario”.

La entidad deportiva ubicada en zona oeste realizó su primera asamblea tras años de abandono y eligió autoridades. Amigos y vecinos, que se criaron en el lugar y lo vieron caer, fueron los protagonistas del resurgimiento.