No es por desagradecimiento ni descortesía, que Sandro no saldrá hoy —en su cumpleaños número 63— a saludar a sus fieles "nenas" que se apelotonan, como cada año, en la puerta de la casona de Banfield donde su ídolo se recluye. El ídolo no lo hará por prescripción médica. Wl Gitano, que aguarda en su casa el llamado que le anuncie que hay donante para hacerse un trasplante cardiopulmonar, no debe tomar frío. De todos modos, hoy se harán múltiples homenajes y cadenas de oración por su salud.
Se sabe que el autor de Rosa Rosa tiene un genio particular y se debe a sus nenas por lo que, seguramente, se las ingenie para hacerles llegar a sus fans su agradecimiento.
Hasta el año pasado, a eso de las 17, el ídolo aparecía en un estrado construido detrás de las barreras para avalanchas y saludaba a sus nenas y les agradecía. Luego, entraba a su mansión para recibir una por una a sus seguidoras y darles un beso.
Este año su delicada salud a raíz de un enfisema pulmonar no dejará que haga su ritual. Pero eso no significó desilusión para algunas de sus fans que por la madrugada se acercaron a la casona con un grupo de mariachis y le cantaron las mañanitas.