La empresa Paraná Metal informó este jueves que se reanudó la actividad en su planta de Villa Constitución, en el sur santafesino, tras cumplirse el pago a los trabajadores de los 7 millones de pesos que se les adeudaban al momento de iniciarse la paralización de la fábrica, a mediados de diciembre pasado.
“Con el cumplimiento del acuerdo firmado en el Ministerio de Trabajo de la Nación, entre Paraná Metal SA, Inversora M&S del Grupo Indalo, los representantes de los trabajadores y autoridades de la UOM, se puso en marcha nuevamente la fábrica en Villa Constitución”, expresa un comunicado difundido este jueves por la patronal.
“Parte del acuerdo previo donde Inversora M & S tomaba 180 días para decidir hacer efectiva la opción de compra del 100 por ciento del paquete accionario, contemplaba que se hiciera cargo del financiamiento necesario para satisfacer los salarios caídos del personal, y del capital de trabajo para la puesta en marcha”, añade el comunicado. “Con el pago de 7 millones de pesos se ha cumplido con el acuerdo, lo que le ha permitido a la empresa retomar las actividades suspendidas desde hace casi dos meses, en un marco de tranquilidad laboral”, concluye.
Inversora M & S del grupo Indalo es una firma que pertenece al empresario Cristóbal López, a quien la oposición al gobierno nacional vincula con Néstor y Cristina Kirchner. López es conocido por sus negocios en el rubro de los juegos de azar y es el propietario del casino que se está construyendo en la zona sur de Rosario.
Su decisión de invertir en Paraná Metal significó una salida al duro conflicto que se declaró en la autopartista villense cuando la patronal decidió paralizar totalmente las actividades de la fábrica y suspender sin goce de sueldo a sus 1200 trabajadores. Los obreros, agrupados en la UOM de Villa Constitución que conduce Alberto Piccinini rechazaron la medida, montaron una carpa frente a la fábrica y realizaron varias movilizaciones para exigir la reanudación de la producción.
Esta situación se mantuvo hasta mediados de enero, cuando intervino directamente en el conflicto el ministro de Trabajo de la Nación, Carlos Tomada, y se llegó a un acuerdo entre las partes que permitió, con la aparición en escena de López, la reanudación de la actividad productiva manteniendo la totalidad del personal.
